Satanás
Top Bible Verses about Satanás
Génesis 3.1
Job 1.6–12
Zacarías 3.1–2
Mateo 4.1–11
1 Pedro 5.8
Apocalipsis 12.9–10
Famous Christian Quotes About Satanás, Acusador, Diablo
No se desalienten ante la tentación
Si Satanás se encoleriza y ruge contra ustedes, ya sea contra sus cuerpos a través de persecuciones, o internamente con una batalla espiritual en sus conciencias, no se desalienten pensando que son menos aceptables en la presencia de Dios o creyendo que Satanás podría prevalecer contra ustedes. ¡No! Las tentaciones y tormentas que surgen tan repentinamente argumentan y dan testimonio de que la semilla que fue sembrada cayó en buena tierra, que ha comenzado a echar raíces y que por la gracia de Dios, en el tiempo debido y conveniente, dará fruto abundante. Eso es lo que Satanás teme, y por tanto se enfurece (y se enfurecerá) contra ustedes, pensando que si puede rechazarlos de repente al principio, entonces serán una presa fácil en todo momento, incapaces de resistir sus ataques. Pero mi oración será tan buena como mi esperanza: que sean fortalecidos de tal manera que el mundo y Satanás entiendan que Dios pelea su batalla.
No seas indulgente con el pecado, pues no será indulgente contigo
Trata al pecado del modo en que te trataría a ti. No seas indulgente pues no será indulgente contigo. Es tu asesino y el asesino del mundo. Trátalo de la manera en que un asesino debería ser tratado. Mátalo antes de que te mate; y entonces, aunque pueda matar tu cuerpo no será capaz de aniquilar tu alma; y aunque pueda llevarte a la tumba, como lo hizo en tu cabeza, no será capaz de mantenerte allí. Si los pensamientos sobre la muerte, la tumba y la putrefacción no te resultan agradables, no permitas que los
pensamientos acerca del pecado sean placenteros o agradables. Escucha cada tentación a pecar como escucharías la tentación a suicidarte y como harías si el diablo trajera un cuchillo y te invitara a cortarte tu garganta; haz esto cuando te ofrezca la carnada del pecado.
¡Cuán proclives somos a descarriarnos!
Somos como pobres ovejas indefensas; el diablo es demasiado sutil con nosotros. ¡Cuál es nuestra fortaleza! ¡Cuál es nuestra sabiduría! ¡Cuán proclives somos a descarriarnos! ¡Cuán fácilmente somos atraídos hacia numerosas trampas mientras que en el entretanto somos valientes y confiados, y no cabe duda de que estamos en lo correcto y seguros! Somos ovejas torpes en medio de serpientes sutiles y lobos crueles, y no lo sabemos. ¡Oh cuán incapaces somos de abandonarnos a nosotros mismos! ¡Y cuánto más necesitamos la sabiduría, el poder, la condescendencia, la paciencia, el perdón y la amabilidad de nuestro buen pastor!