Anhelar la presencia de Dios

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Introducción

En estos momentos nos encontramos de que David ya es nombrado como moncarca de Israel. David ya no tiene porque huir de nadie porque aquel que lo buscaba para matarlo, el rey Saúl, murió en el campo de batalla contra los filisteos.

Por lo que lo primero que hizo David cuando llegó al trono fue expulsar de su territorio al adversario número 1 de Israel que eran los filisteos. David comienza a realziar las primeras reformas políticas para establecer su reinado, para ello se establece en Jerusalén y la transforma en la capital de la nación.

Sin embargo, cuando termina de establecer Jerusalén como la capital de Israel, ahora David quiere convertir Jerusalén en el centro religioso. Dado que el buen rey no solo se ha de preocupar por la situación política de su reino, sino también por la situación espiritual de su territorio. Y en este aspecto ya encontramos un claro contraste entre el reinado de Saúl y el de David.

Durante los últimos años del reinado de Saúl, se había producido un abandono a la adoración de Dios. El Tabernáculo estaba dañado por el paso del tiempo y no lo habían reparado. A esto hay que añadirle que el mobiliario estaba disperso por todas partes. Por esta razón, David va a querer traer el mobiliario más importante del Tabernáculo que era el arca del pacto. Dicha arca había sido capturada por los filisteos antes del reinado de Saúl (este acontecimiento podemos encontrarlo en 1 Samuel 4-6) y los filisteos la tuvieron que devolver a los israelitas porque Dios le había enviado enfermedades y mortandad a los habitantes filisteos, para ello montaron el arca del pacto en un carro y se la devolvieron a los Israelitas y hasta este momento el arca se quedó en la casa de Abinadad. Y ahora David quería llevarla a Jerusalén.

¿Pero qué es el arca de Dios y qué simboliza? El arca de Dios es un pequeño mueble de madera recubierto completamente de oro y esa arca representaba la presencia de Dios en medio del pueblo de Israel. Por eso, podemos entender la celebración que realiza David ya que está llevando la presencia de Dios a Jerusalén. Sin embargo, en este pasaje hay dos eventos que estropean la celebración. En primer lugar tenemos la muerte de Uza y la segunda son las palabras de Mical a David.

Sin embargo, antes de empezar con el estudio de este pasaje, hay que decir que es un pasaje difícil de comprender y con algunos elementos enigmáticos, donde algunas personas al toparse con textos como esto son un hueso duro de digerir. Espero y deseo que con la ayuda de Dios podamos comprender el mensaje que Dios tiene para nosotros en el día de hoy. También matizar que esta historia no solo la encontramos aquí, sino que aparece mucho más detalla en 1 Crónicas 13 y 1 Crónicas 15-16:3 por lo que aunque no leeremos ese pasaje en el día de hoy sí que para realizar el desarrollo de la predicación he tenido en cuenta esos pasajes ya que nos ayuda a comprender algunas ideas que en nuestro texto no están del todo claras.

David busca el arca según sus medios

Una vez que ya estamos contextualizados tanto del significado del arca del pacto como del contexto histórico ya podemos adentrarnos en el pasaje. Y el texto comienza con una acción de David, era tantas las ganas que tenía David de traer el arca a Jerusalén que reunió a 30.000 hombres para ir a buscarla y traerla a su casa que se encontraba en Jerusalén.

En el versículo 1 ya podemos ver un pecado muy grande en David camuflado con buenas intenciones, cuantos pecados realizamos como David y los disimulamos con buenas intenciones. ¿Qué es lo que estoy diciendo? Mirar bien lo que pasa en el versículo 1 o mejor dicho mirar lo que no pasa en ese versículo. Mientras vemos en 2 Samuel 5:19 “Entonces consultó David a Jehová, diciendo: —¿Iré contra los filisteos? ¿Los entregarás en mis manos? Respondió Jehová a David: —Ve, porque ciertamente entregaré a los filisteos en tus manos.” consultando a Dios, en esta decisión tan importante no lo vemos consultandoa Dios. A diferencia de las anteriores ocasiones cuando David iba a atacar a los filisteos solicitaba y pedía consejos del Señor, pero en esta ocasión David no busca el consejo de Dios sino el consejo de las personas tal y como nos dice 1 Crónicas 13:1 “Entonces David consultó con los capitanes de millares y de centenas, y con todos los jefes.” Menuda mina de oro tenemos aquí, perdonarme que pase rápido por aquí, pero tenemos todavía mucho texto por delante, pero dejarme resaltar la necedad de David consultando a los militares en vez de consultar a los levitas.

Primera aplicación para nuestras vidas, mucho cuidado dónde buscamos los consejos no vaya a ser que dichos consejos nos lleven a la ruina. David buscó consejos en el lugar equivocado, en vez de ir a consultar a los levitas y sacerdotes o consultar a Dios, va en busca de la opinión de los hombres, cuando nos guíamos por el consejo de los hombres y no por el consejo de Dios podemos entar seguros que nos estamos conduciendo a territorios peligrosos. Hay un refrán español que dice lo que mal empieza, mal acaba, así que ya os podéis imaginar como va a terminar esta historia.

Entonces vemos que el primer error lo encontramos en no buscar el consejo de Dios al respecto y el segundo pecado que observamos en nuestro pasaje se encuentra en el versículo 3 dado que pusieron el arca de Dios sobre un carro nuevo. Lo mismo que habían hecho los filisteos ahora lo va a hacer los israelitas.

Dios había establecido que el arca de Dios debía de trasladarse por los levitas y no a través de carros nuevos, aunque los filisteos la devolvieron de esta forma, los israelitas no debían de comportarse como los filisteos, tenemos que tener mucho cuidado de no prestar a tención a los pequeños detalles y hacer las cosas a nuestra manera.

La adoración a Dios se ha de realizar según lo proscrito por Dios en su palabra, no todo vale en la iglesia, no todo es válido, esto no es un lugar donde cada uno pueda hacer lo que quiera, mucho cuidado de traer carros nuevos para transportar el arca de Dios, mucho cuidado de secularizar la iglesia. La Biblia ya había establecido cómo se tenía que trasporta el arca en Éxodo 25:14 “Y meterás las varas por las argollas a los lados del Arca, para llevar el Arca con ellas.”

Charles Swindoll desarrollando este pasaje dice que muchas veces no queremos tomarnos el tiempo para buscar las varas, o no uqeremos tomarnos las molestias de ponernos las varas sobre los hombros. Para nosotros nos resulta mñas fácil utilizar un carro. El sistema de este mundo nos dice que no nos preocupemos por los pequeños detalles que Dios ha establecido, pero si Dios se ha dignado en dejarnos cada detalle no es para que lo saltemos por alto, sino para que lo cumplamos.

De ahí que Uza y Ahío que eran hijos de Abinadad que eran llamado para cargar en arca, en vez de eso los vemos guiándo el arca. Querían que las cosas hicieran su trabajo. De cargadores se volvieron guías del carro. Hermanos y hermanas cada uno de nosotros tenemos que cargar con nuestras responsabilidades, no pedemos dejar nuestras responsabilidades en carros. No podemos dejar en carros aquello que Dios quiere que llevemos nosotros sobre nuestros hombros.

Cuando cargaron el arca en el carro y estaban dirigiéndose hacia Jerusalén, David y todos los israelitas estaban de celebración, lo que no sabía todavía es que a causa de sus precipitaciones y pecados se estaban precipitando hacia una gran tragedia, era como un coche en una cuesta abajo sin frenos es cuestión de segundos para que dicho coche se estampe. Y los versículo 5 al 7 tenemos una enseñanza muy clara y es que de la alabanza al lamento hay una línea muy fina, David pasó de cantar alananzas a Dios a lamentar la pérdida de Uza en cuentión de segundos.

Cuando el arca llegó a la era de Nacón, van a pagar bien caro la desobediencia a Dios. Si el arca no debía de ir en carros se debía porque los bueyes pueden tropezar y el arca se puede caer. Y justamente, eso es lo que sucede y la reacción instintiva de Uza es sujetar el arca para que no se caiga al suelo, pero había una leí que decía aquel que tocase el arca de Dios moriría a causa de la santidad de ésta, Números 4:15 “Después que acaben Aarón y sus hijos de cubrir el santuario y todos los utensilios del santuario, cuando haya que mudar el campamento, llegarán los hijos de Coat para llevarlos, pero no tocarán ninguna cosa santa, no sea que mueran. Estas serán las cosas que cargarán los hijos de Coat en el Tabernáculo de reunión.”

Aunque la intención de Uza era buena, aún así estaba desobedeciendo los mandamientos de Dios. Por encima de nuestras buenas intenciones se ha de encontrar la obediencia a Dios que es lo que nos conduce a la santidad.

Uza intentó ayudar a Dios para que no se cayera el arca, esta escena nos da la impresión de que Dios precisa de ayuda y protección de su pueblo, pero en realidad es al contrario, somos nosotros quines necesitamos la ayuda y portección de Dios. Hay ocasiones y momentos que a nosotros nos pasa lo mismo que Uza, queremos proteger la obra de Dios más que Él mismo. Dios es suficiente pra cuidar lo que le pertenece.

Cuando David presencia este acontecimiento, primero se enoja porque Dios había matado a Uza y luego rápidamente teme a Dios y es consciente que con Dios no podemos hacer las cosas a nuestras formas y maneras, sino según lo establecido por Dios. David detiene la procesión y dejarán el arca en la casa de Obed-edom. El arca estuvo en ese lugar durante 3 meses y todo ese tiembo que estuvo allí Dios bendiho la casa de Obed-edom.

Y que buenas noticas tenemos aquí porque aunque tenemos un Dios justo también tenemos un Dios lleno de gracia y misericordia. Y el versículo 11 es impresionante dado que cuando el arca llega a la casa de este hombre Dios bendice su hogar. Cuando la presencia de Dios llega a un hogar, Dios acaba bendiciendo dicho hogar.

David busca el arca según los medios de Dios

Es en ese momento cuando la situación cambia completamente, David ha sido duramente humillado por lo sucedido y cambia completamente de actitud. Ahora no va a realizar el traslado del arca según su criterio y medios, sino según la forma de Dios.

Aunque el texto que tenemos delante no lo menciona, en su paralelo en 1 Crónicas 15:2-3 “Entonces dijo David: «El Arca de Dios no debe ser llevada sino por los levitas; porque a ellos ha elegido Jehová para que lleven el Arca de Jehová, y le sirvan perpetuamente». Congregó, pues, David a todo Israel en Jerusalén, para que llevaran el Arca de Jehová al lugar que él le había preparado.” nos cuenta que en esta ocasión el arca la va a llevar los levitas, no ningún carro.

Cuando el arca llegó a Jerusalén, el pueblo se alagró profundamente y David realiza 3 acciones: hizo sacrificios a Dios, bendijo al pueblo y les repartió alimentos.

Pero, en mitad de la historio cuando el arca llega a Jerusalén y David está gozoso danzando para Dios, su mujer Mical lo observa desde la venta y lo desprecia en su corazón.

La situación de Mical requiere que hagamos un pequeño alto y la analizemos bien porque es muy llamativo lo que encontramos aquí. La escena es que tenemos a todo un pueblo gozoso porque el arca de Dios está en Jerusalén, pero hay una persona que está completamente amargada y no tiene alma para ningún tipo de fiesta y celebración. Esa persona es nada más y nada menos que la esposa de David llamada Mical que curiosamente en este texto no se le identifica como mujer de…, sino como hija de…

Lo que Mical nos enseña con su actitud y lo desarrollaré a continuación es que cuando nosotros somos verdaderamente libres, las personas que no son tan libres se sentirán incómodas ante nuestra libertad tal y como le sucedió a Mical. Pero, ¿por qué Mical no se siente libre? La razón se debe porque es prisionera de la amargura.

Mical había sido separado de su anterior mariodo que la amaba, recientemente había perdido a su padre y a dos de sus hermanos en el campo de batalla y había perdido a otro hermano que había sido asesinado por traición, todos esos elementos provocó en Mical que se convirtiera ella misma en su peor enemiga y no pudiera soportar ver a otras persoas se felices y gozosas.

Cuando tenemos ese estado de ánimo nos convertimos en personas juiciosas, juzgamos a las personas por todo, las juzgamos según su adoración a Dios, nos avergüenzan las expresiones que puedan utilizar para alabar a Dios. Tenemos que huir de esa actitud crítica y judicial, de condenar a nuestros germanos en la fe porque nos da vergüenza su forma de adorar, hemos de entender que tal persona no nos está adorando a nosotros, sino que está adorando a Aquel que ha librado su alma del infierne y por lo tanto goza de una vida eterna. En ocasiones a lo largo de los tiempos y a lo largo y ancho del globo terráqueo la misma iglesia se ha opuesto a una celebración gozoso. Hay muchas personas dentro de la iglesia que como Mical están llenas de amargura y resentimiento, y menosprecian a los que celebran con gozo la presencia de Dios.

Por lo tanto, cuando terminó la ceremonia y David se dirigía a su hogar para bendecir a su familia. David tenía el deseo de bendecir su casa, porque sabía ¿de qué vale bendecir a otros, y no bendecir a su familia? Y hoy en día nos encontramos en momentos muy críticos y paradójicos donde hay pastores o ancianos de iglesia que no pastorean su familia, evangelistas que no predican el evangelio a sus familiares, conferenciantes o consejeros matrimoniales divorciados y casados por segunda vez, el ministerio camienza y termina en el hogar.

Sin embargo, la sorpresa que nos encontramos es que David al entrar por la puerta se encontró con su mujer Mical con ganas de explicarle un par de cosas. Mientras leía este pasaje me apenaba encontrarme con esecenas así que por desgracia son bastante frecuentes también en nuestros días. A quién no le ha sucedido aquellos que estamos en el ministerio sirviendo a Dios que después de un tiempo precioso de adoración a Dios, lo primero que sucede al entrar en las puertas de nuestro hogar es tner problemas con nuestra ayuda idónea. Ojalá nuestros hohgares no sean como estos que cada vez que venimos de minisytrar en la presencia de Dios en vez de continuar dicha adoran en nuestros hogares lo que nos encontramos es un jarrón de agua fría sobre nosotros, que nuestro culto y alabanza a Dios no termine en el momento de entrar por las puertas de nuestras casas. Y viceversa espero que nosotros no seamos esa pieda en el zapato para nuestras parejas, espero y deseo que no seamos nosotros los primeros en arruinar el gozo de nuestras mujeres o hijos cuando vienen de un lugar completamente bendecidos por Dios.

Pero, ¿Cómo debemos de acturar cuando somos atacados por las personas más cercanas? La Biblia también nos deja en eso un buen ejemplo en este pasaje, y la fórmula se encuentra en buscar la opinión de Dios en todo momento. Para David era más importante la opinión de Dios que la crítica carnal de Mical, que así sea también en nosotros. Y ¿Cómo debemos de responder a aquellos que intentar acallar nuestras alabanzas a Dios? A esta pregunta la responde muy bien Kittim Silva: «El espíritu de Mical que busca la rutina, la monotonía, el aburrimiento y el conformismo necesita ser confrontado con el espíritu de David, el espíritu de la alabanza y la adoración.»

La historia termina con una terrible maldición para Mical dado que no tuvo hijos algo muy importante para una mujer en aquella época, al no ser una buena esposa Dios no le permitió disfrutar de la maternidad. Y en el versículo 23 se esconde una tremenda realidad espiritual para nuestras vidas y es que cuando pasamos de examinar nuestras vidas a examinar las vidas de los demás y juzgamos sus adoraciones pensando que nuestra adoración es más pura y santa que la del resto de personas, es en ese momento que dejamos de ser útiles al reino de Dios y dehamos de dar frutos espirituales, dejamos de dar hijos espirituales, en el momento que Mical se centró en la adoración de David en vez de cómo adoraba ella a Dios fue en ese momento que dejó de dar a luz hijos. Examinemos nuestras vidas y pidámole a Dios que nos quite aquellas cosas que nos apartan de esa adoración genuina en espíritu y verdad.

Por útlimo, me gustaría terminar remarcardo el evangelio de Cristo ya que en esta historia se puede ver un claro paralelismo entre la obra de Cristo por nosotros y lo que ha sucedido en esta última escena cuando el arca de Dios llega a Jerusalén. Al igual que el arca de Dios representaba la presencia de Dios que venía a morar a Jerusalén, Cristo vino a traernos a cada uno de nosotros su presencia, vino a morar con nosotros para tabernaculizar con nosotros según nos diría Juan en su evangelio, pero la reacción que tuvo cuando Cristo vino fue de rechazo, de la misma forma que Mical rechazó a David. ¿Pero por qué rechazó Mical a David? Por haberse humillado delante del pueblo, de la misma forma la humillación de Dios en Cristo supuso que el pueblo judío también lo rechazara, ellos esperaban un rey exaltado sobre un trono y no un hombre exaltado sobre una cruz. Cristo vino a lo suyo, pero los suyos no lo recibieron. No obstante, el paralelismo no termino aquí. En esta misma historia que hemos leído en esta mañana vemos al monarca vestido de sacerdote y realizando acciones sacerdotales como realizar sacrificios o dar la bendición a las personas, de la misma forma Crisyo no es solo nuestro gran rey, sino nuestro gran sumo sacerdote que está dispuesto a bendecirnos de la misma forma qye David bendijo al pueblo. David ofreción pan a su pueblo, de la misma forma Crsto nos ofrece a cada uno de nosotros el pan de vida aque pan que aquella persona que lo coma no morirá jamás. Hermanos y hermanos, tenemos un gran sumo sacerdote que está abogando por nosotros, nuestro destino debía de ser el de Uza, si solo por tocar el arca cayó fulminado que no nos debería de pasar a nosotros, si no fuela por la justicia en santidad que Dios nos imputa a nosotros a través de la obra de Cristo ya hubieramos caido todos nosotros fulminados, pero como dice la Biblia en Lamentaciones 3:22 “Que por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias;”

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