Buscad Primeramente El Reino De Dios

Sermon  •  Submitted
0 ratings
· 8,133 views
Notes
Transcript

BUSCAD PRIMERAMENTE EL REINO DE DIOS…

El fin del Evangelio de la salvación por medio del sacrificio de Jesucristo es que entremos en el Reino de Dios, por ello estas palabras de Jesucristo tomadas de Mateo 6:33, nos ponen en situación ante lo que ha de ser la prioridad de nuestra vida.

Del mismo modo las palabras: …ama a tu prójimo como a ti mismo… Marcos 12:31, nos llevan a una conclusión similar en cuanto a la prioridad para con nuestro prójimo; si lo mejor para nosotros es el Reino de Dios, lo mejor para nuestro prójimo es también el Reino de Dios.

Pero quisiera transmitir un enfoque que Dios me ha permitido ver y que debería estar en el conocimiento de todos los que le aman. Hasta ahora la frase …el Reino de Dios está entre nosotros… tal y como nos dice el Maestro, se hace efectiva si comprendemos que Jesucristo mismo es el Reino de Dios en persona. El texto Bíblico que el Señor usa para revelarnos esta realidad está a lo largo de este estudio.

El Reino de Dios en 7 apartados: Haga clic en los títulos y luego en cada apartado a su vez en sus títulos para ir al siguiente:

1 ¿CÓMO Y DONDE ES EL REINO DE DIOS?:

2 COMPARACIÓN ENTRE EL REINO DE DIOS Y EL DEL MUNDO:

3 DIOS ES EL REY DE TODA CREACIÓN:

4 JESUCRISTO EL REY ETERNO ANUNCIADO:

5 PARÁBOLAS Y ACONTECIMIENTOS EN EL REINO DE DIOS:

6 CÓMO Y QUIENES ENTRAN EN EL REINO DE DIOS:

7 ¿CUANDO VIENE JESUCRISTO EN SU REINO?:


¿CÓMO Y DONDE ES EL REINO DE DIOS:?

El Reino de Dios es la presencia de Dios gobernando todo lo que existe, pero se divide en dos estados básicos: El Reino de Dios establecido a nuestro alrededor y el Reino de Dios dentro de nosotros.

El primero no se deja ver con respecto a la humanidad y su tiempo, porque el hombre ha aborrecido al Señor, y aunque es Dios no es el dios del mundo, y aun siendo Dios de todo, ha permitido al llamado dios del mundo, el diablo, gobernar el sistema del mundo y a los hombres, ya que ha arrebatado el reino que Dios puso en manos de Adán, la humanidad, desde Edén, desde que tenemos una mente capaz de relacionarse con Él y de ser Su esposa espiritualmente. …no ruego por el mundo, sino por los que me diste… oración de  Jesús en Juan 17:19.

El segundo, el Reino de Dios en nuestra alma, es cuando el hombre se entrega a Dios y le concede la autoridad de su vida a Jesucristo, recibiendo en ese momento la bendición de una relación con el Padre, teniendo el amor de Jesucristo, la sabiduría para una vida plena en la verdad y la posibilidad de amar a nuestro prójimo mediante el poder de Dios. Así el hombre en cuya alma está el Reino de Jesucristo recibe el poder de transmitir el amor de Dios a otros y de anunciarles la salvación de sus almas para la eternidad por medio del Evangelio del Reino de Dios.

Por otro lado aquellos que disfrutan ya del Reino de Dios en ellos, reciben la guía de Dios para sus familias y seres queridos, para su subsistencia y para toda circunstancia. Además Dios otorga una fuerza desconocida para superar la adversidad y una esperanza que el hombre sin Dios no conoce, pues hasta ahora la humanidad se debate entre la guerra y la codicia, pero los hijos de Dios viven como en el Reino de Dios.

TEXTOS BÍBLICOS

DANIEL 2

44Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre,

El Reino de Jesucristo, al que se refiere el texto, desmenuzará y consumirá los reinos que había en nuestra alma y los del mundo al final. Él permanece para siempre.

MATEO 3

1En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, 2y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. 3Pues éste es aquel de quien habló el profeta Isaías, cuando dijo: Voz del que clama en el desierto: preparad el camino del Señor, enderezad sus sendas.

Esta es la profecía mayor que se cumplió, la venida de Jesucristo tras el anuncio de Juan con el espíritu de Elías, lo que anunció Isaías.

MATEO 6

10Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra… …13 Porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén.

En la famosa oración que Jesucristo nos enseñó ya se mencionan las glorias del Reino de Dios y su eternidad.

MATEO 8

11Y os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán con Abraham e Isaac y Jacob en el reino de los cielos;

Qué precioso texto donde el Señor nos enseña que de todas las culturas vendrán para recibir a Cristo y acceder a Su reino.

MATEO 12

28Pero si yo por el Espíritu de Dios echo fuera los demonios, ciertamente ha llegado a vosotros el reino de Dios.

Ha llegado a nosotros Jesucristo, el Reino de Dios.

ROMANOS 14

17porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo.

1 CORINTIOS 4

20Porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder.

Pablo nos enseña por el Espíritu Santo algo que es necesario discernir con claridad. Muchos hay con palabras, como pasaba en el Sanedrín, pero en realidad los que sirven a su prójimo en el Señor reciben un poder espiritual que se manifiesta en sus obras, en el resultado de sus oraciones y en el resultado en las vidas de aquellos a los que sirven.


COMPARACIÓN ENTRE EL REINO DE DIOS Y EL DEL MUNDO:

JUAN 18

36Respondió Jesús: Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de este mundo, mis servidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; pero mi reino no es de aquí.

Este texto nos muestra con claridad que el mundo no es el Reino de Dios, que aunque Él es quien reina sobre todo lo creado, lo bueno y malo en la vida de los hombres dependerá de su relación con Dios. Dios deja que el diablo gobierne porque arrebató a los hombres el dominio que Dios había puesto en nuestras manos. Así pues el pueblo de Dios podemos recurrir a Él para que nos bendiga y nos libre del enemigo aunque aún no hayamos entrado en el Reino eterno de nuestro Señor Jesucristo.

GÁLATAS 5

18Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley. 19Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, 20idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, 21envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.

22Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, 23mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. 24Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos.

Este texto habla por si mismo. Ahora bien, Ud. Puede llegar a todo esto aplicando el estudio: VIRTUD.


DIOS ES EL REY DE TODA CREACIÓN:

Un concepto que es necesario asimilar, es que el Creador, el Rey de toda la existencia es Dios, pero la mente humana tiene un problema, está acostumbrada a ver para creer. Esto es debido a la incapacidad para ver en la dimensión espiritual de Dios, pero hay una solución que es recibir la mente de Cristo, tal y como nos dice la Escritura: 1Corintios 2:16.

A partir de aquí el hombre puede comprender la realidad que el mundo, gobernado por el diablo durante el tiempo de la humanidad, se encarga de tapar con las tinieblas mentales para dominar a las masas, con estrategias como las religiones, las costumbres, las leyes, las etnias, las falsas deidades, etc.

A continuación si Ud. ya ha reflexionado y ha caminado cerca de Dios, ha leído la Biblia y quiere recibir el Reino de Dios siga al siguiente apartado.

TEXTOS BÍBLICOS:

ÉXODO 15

18 Yahweh reinará eternamente y para siempre.

1 CRÓNICAS 16

31Alégrense los cielos, y gócese la tierra, y digan en las naciones: Yahweh reina.

Esto lo vamos a ver con nuestros ojos, a ciudadanos de todas las naciones alegrándose, y todas las personas tiene la oportunidad.

1 CRÓNICAS 29

11Tuya es, oh Yahweh, la magnificencia y el poder, la gloria, la victoria y el honor; porque todas las cosas que están en los cielos y en la tierra son tuyas. Tuyo, oh Yahweh, es el reino, y tú eres excelso sobre todos.

SALMO 22

27Se acordarán, y se volverán a Yahweh todos los confines de la tierra, y todas las familias de las naciones adorarán delante de ti. 28Porque de Yahweh es el reino, y él regirá las naciones.

SALMO 45

6Tu trono, oh Dios, es eterno y para siempre; Cetro de justicia es el cetro de tu reino.

SALMO 47

7Porque Dios es el Rey de toda la tierra; Cantad con inteligencia. 8Reinó Dios sobre las naciones; Se sentó Dios sobre su santo trono.

SALMO 103

19Yahweh estableció en los cielos su trono, y su reino domina sobre todos. 20Bendecid a Yahweh, vosotros sus ángeles, poderosos en fortaleza, que ejecutáis su palabra, obedeciendo a la voz de su precepto. 21Bendecid a Yahweh, vosotros todos sus ejércitos, ministros suyos, que hacéis su voluntad.

SALMO 145

13Tu reino es reino de todos los siglos, y tu señorío en todas las generaciones.

DANIEL 4

3¡Cuán grandes son sus señales, y cuán potentes sus maravillas! Su reino, reino sempiterno, y su señorío de generación en generación.

17La sentencia es por decreto de los vigilantes, y por dicho de los santos la resolución, para que conozcan los vivientes que el Altísimo gobierna el reino de los hombres, y que a quien él quiere lo da, y constituye sobre él al más bajo de los hombres.

DANIEL 7

13Miraba yo en la visión de la noche, y he aquí con las nubes del cielo venía uno como un hijo de hombre, que vino hasta el Anciano de días, y le hicieron acercarse delante de él. 14Y le fue dado dominio, gloria y reino, para que todos los pueblos, naciones y lenguas le sirvieran; su dominio es dominio eterno, que nunca pasará, y su reino uno que no será destruido.

Como podemos leer, durante todos los tiempos,  la profecía sobre el Reino de Cristo ha sido constante.

APOCALIPSIS 11

15El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos…

Amén, por fin el Señor, a su tiempo, aunque no haya parecido largo, tomará todos los reinos del mundo y reinará eternamente.

…17diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado.

Gran poder era necesario para restaurarnos el reino que Dios nos dio y que la serpiente nos arrebató en Edén, porque no quisimos la guía de nuestro Padre, y estando claro que el hombre en su mayoría no ha tenido voluntad de luchar contra el enemigo de las almas, aquellos que si han sido llamados, han recurrido a la ayuda de Dios, y Dios ha enviado a su Hijo Jesucristo, ha venido a la tierra y ha vencido la guerra contra nuestro enemigo con su gran poder, ya que Él es el creador incluso de los ejércitos que se le oponen.


JESUCRISTO EL REY ETERNO ANUNCIADO:

ISAÍAS 9

6Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. 7Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Yahweh de los ejércitos hará esto.

Este es el texto que con mayor especificación describe las cualidades del Rey y del Reino de Jesucristo el Padre.

MATEO 26

29Y os digo que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día en que lo beba nuevo con vosotros en el reino de mi Padre.

Jesucristo nos espera en las Bodas del Cordero una vez sea establecido su Reino, el Reino que el Padre entrega en su mano.

LUCAS 1

30Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios. 31Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS. 32Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; 33y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.

Otra de las mayores profecías se cumple en Su nacimiento, tal y como fue profetizado.

LUCAS 10

9y sanad a los enfermos que en ella haya, y decidles: Se ha acercado a vosotros el reino de Dios.

Jesús estaba con ellos cuando eran encomendados en la labor de sanar y predicar, y les es instruido que enseñen que eso mismo es lo que pasa en el Reino de Dios, y ese Reino es Jesucristo mismo que al venir a nosotros, lo pone a nuestro alcance.

HEBREOS 1

8Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo; Cetro de equidad es el cetro de tu reino.

El Hijo es quien reina eternamente aunque se dice que el Reino es del Padre, en realidad al Padre y el Hijo son uno solo en dos diferentes situaciones, la dimensión del hombre y la dimensión del cielo.


PARÁBOLAS  Y ACONTECIMIENTOS EN EL REINO DE DIOS:

DANIEL 7

18Después recibirán el reino los santos del Altísimo, y poseerán el reino hasta el siglo, eternamente y para siempre.

MATEO 13

LEA EL TEXTO SUBRAYADO:

24Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo; 25pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña entre el trigo, y se fue. 26Y cuando salió la hierba y dio fruto, entonces apareció también la cizaña. 27Vinieron entonces los siervos del padre de familia y le dijeron: Señor, ¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, tiene cizaña? 28El les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los siervos le dijeron: ¿Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos? 29El les dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también con ella el trigo. 30Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero.

31Otra parábola les refirió, diciendo: El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo; 32el cual a la verdad es la más pequeña de todas las semillas; pero cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, de tal manera que vienen las aves del cielo y hacen nidos en sus ramas.

36Entonces, despedida la gente, entró Jesús en la casa; y acercándose a él sus discípulos, le dijeron: Explícanos la parábola de la cizaña del campo. 37Respondiendo él, les dijo: El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre. 38El campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del malo. 39El enemigo que la sembró es el diablo; la siega es el fin del siglo; y los segadores son los ángeles. 40De manera que como se arranca la cizaña, y se quema en el fuego, así será en el fin de este siglo. 41Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad, 42y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes. 43Entonces los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre. El que tiene oídos para oír, oiga.

45También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas, 46que habiendo hallado una perla preciosa, fue y vendió todo lo que tenía, y la compró.

La perla preciosa es el Reino de Dios, y vender lo que uno tiene es dejarlo todo para recibir el Reino y vivir para Dios.

47Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que echada en el mar, recoge de toda clase de peces; 48y una vez llena, la sacan a la orilla; y sentados, recogen lo bueno en cestas, y lo malo echan fuera. 49Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles, y apartarán a los malos de entre los justos, 50y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

MATEO 22

1Respondiendo Jesús, les volvió a hablar en parábolas, diciendo: 2El reino de los cielos es semejante a un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo; 3y envió a sus siervos a llamar a los convidados a las bodas; mas éstos no quisieron venir.

El Señor se siente despreciado por los hombres que no reciben la invitación al Reino mediante el Evangelio de su Hijo Jesucristo predicado por aquellos que anunciamos Su reino.

4Volvió a enviar otros siervos, diciendo: Decid a los convidados: He aquí, he preparado mi comida; mis toros y animales engordados han sido muertos, y todo está dispuesto; venid a las bodas.

Los toros y animales engordados son un símbolo del Cristo, que fue sacrificado por nosotros, como lo eran en la Ley los animales engordados, es decir, que solo tenemos que aceptarle como nuestro Salvador y venir a las bodas, a nuestra boda con Él.

5Mas ellos, sin hacer caso, se fueron, uno a su labranza, y otro a sus negocios; 6y otros, tomando a los siervos, los afrentaron y los mataron. 7Al oírlo el rey, se enojó; y enviando sus ejércitos, destruyó a aquellos homicidas, y quemó su ciudad. 8Entonces dijo a sus siervos: Las bodas a la verdad están preparadas; mas los que fueron convidados no eran dignos. 9Id, pues, a las salidas de los caminos, y llamad a las bodas a cuantos halléis. 10Y saliendo los siervos por los caminos, juntaron a todos los que hallaron, juntamente malos y buenos; y las bodas fueron llenas de convidados.

Los siervos ahora son enviados a predicar a los gentiles ya que los del Israel literal, los de la Ley no aceptaron a su Salvador. Buenos y malos que aceptan a Cristo son invitados a las bodas.

11Y entró el rey para ver a los convidados, y vio allí a un hombre que no estaba vestido de boda.

Imprescindible es el vestido de boda: ¿está Ud. vestido de boda espiritualmente? La respuesta es si Ud. Ha aceptado ser cubierto de la Sangre de Cristo que Él derramó en la cruz para pagar por sus pecados, que Ud. Esté recubierto de la vida de Cristo, si no, no puede entrar a las bodas.

12Y le dijo: Amigo, ¿cómo entraste aquí, sin estar vestido de boda? Mas él enmudeció. 13Entonces el rey dijo a los que servían: Atadle de pies y manos, y echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes. 14Porque muchos son llamados, y pocos escogidos.

Cruda realidad, a muchos anunciamos el Reino de Dios, pero pocos lo reciben en sus corazones y cambian sus vidas. Por sus hechos los conoceréis.

MATEO 25

1Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al esposo.

Las diez vírgenes son las almas de todos los hombres y mujeres.

2Cinco de ellas eran prudentes y cinco insensatas. 3Las insensatas, tomando sus lámparas, no tomaron consigo aceite; 4mas las prudentes tomaron aceite en sus vasijas, juntamente con sus lámparas.

La vasija representa el alma de la persona; esta vasija debe contener aceite que es la unción del Espíritu Santo para que no le falte a la lámpara que es nuestro espíritu

5Y tardándose el esposo, cabecearon todas y se durmieron. 6Y a la medianoche se oyó un clamor: ¡Aquí viene el esposo; salid a recibirle!

A la media noche representa el tiempo de la venida del Señor en su Reino, cuando no lo esperamos, cuando dormimos, cuando cada uno sigue con su vida, con el Señor o sin el Señor.

7Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron, y arreglaron sus lámparas. 8Y las insensatas dijeron a las prudentes: Dadnos de vuestro aceite; porque nuestras lámparas se apagan.

Las lámparas se apagan, los espíritus no tienen fuerza ni vida por si mismo si no se alimentan del Espíritu Santo.

9Mas las prudentes respondieron diciendo: Para que no nos falte a nosotras y a vosotras, id más bien a los que venden, y comprad para vosotras mismas. 10Pero mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y se cerró la puerta.

Los que venden son los pastores de las ovejas, aquellos que predican el verdadero Evangelio y el conocimiento de Jesucristo, como alimento sólido durante sus vidas. Estos pueden rápidamente enseñar las bases del Evangelio, pero es necesario también que pedir al Señor que nos alimente mediante la lectura de Su Palabra, La Biblia, y orando y meditando para recibir interpretación, compartirla y escudriñando Las Escrituras para estar preparado cada día para mantenerse en la Salvación que nos regala Jesucristo, y para dar testimonio a otros que estén preparados para recibir el Reino de Dios.

Todo esto en la presencia de Dios, trae la unción de Dios, el aceite de las lámparas, el cual no vale para otros sino para uno mismo. No vale la fe de los demás, o caminar con los que van con Dios, si uno no tiene su propia relación con Dios, habiendo nacido de nuevo.

Por lo tanto, si Ud. Deja las cuestiones del Reino de Dios para el último momento, no tendrá tiempo de recibir la Salvación. Y ahora no tiene Ud. Excusa, pues acaba de ser exhortado a hacerlo, depende de Ud. libre soy yo de su sangre.

11Después vinieron también las otras vírgenes, diciendo: ¡Señor, señor, ábrenos! 12Mas él, respondiendo, dijo: De cierto os digo, que no os conozco. 13Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir.

Demasiado tarde hermano/a.

33Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda. 34Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. 35Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; 36estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí.

Id y haced esto, juntamente con la predicación del Evangelio y la enseñanza de la Biblia, tras recibir a Jesucristo como salvador y vuestro amor no desfallecerá. Tendréis amplia entrada en el Reino de nuestro Padre por la eternidad.

APOCALIPSIS 20

4Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años.

El reino milenial es un punto de controversia en cuanto a su duración, composición de los que se sientan en los tronos y lugar del reinado.

Lea el estudio MILENIO.

APOCALIPSIS 22

5No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos.

Este es el estado final en el que se vivirá en el Reino eterno del Señor.


CÓMO Y QUIENES ENTRAN EN EL REINO DE DIOS:

El requisito que se nos anuncia por parte de Jesucristo para entrar en el Reino de Dios es nacer de nuevo, de lo alto, no de la carne sino del Espíritu de Dios. Esto quiere decir efectivamente que el hombre no está vivo para con Dios, puede que vivo espiritualmente en una relación con otros espíritus, pero no con Dios.

Este nuevo nacimiento transforma nuestro pensamiento, nuestra mente y nuestro espíritu, de manera que nos convertimos en nueva criatura. Para esto ha sido necesario primero que Jesucristo haya dado su vida por nuestros pecados y haya vencido a nuestro enemigo, el diablo y la muerte. Solo cuando hemos creído el Evangelio en nuestro corazón, el cual Dios ve, se nos permite la entrada en el Reino de Dios.

El Reino de Dios pues comienza en una persona cuando esta decide por la fe derrocar dentro de su alma a Satanás e invitar a Jesucristo a sentarse en el trono que gobierna su vida, esto solo se puede hacer con el poder de Jesucristo cuando Él nos ve dispuestos a luchar, sino es en vano, porque el enemigo es una potestad superior. El hombre ha de ceder la autoridad a Dios y no a su carne, ni a su mente sin el Espíritu de Dios o a los reinos y ofrecimientos del mundo.

TEXTOS BÍBLICOS

GÉNESIS 19

6Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y gente santa.

MATEO 5

3Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.

MATEO 6

33Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.

MATEO 7

21No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.

MATEO 11

12Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan. 13Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan. 14Y si queréis recibirlo, él es aquel Elías que había de venir. 15El que tiene oídos para oír, oiga.

MATEO 13

10Entonces, acercándose los discípulos, le dijeron: ¿Por qué les hablas por parábolas? 11El respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del reino de los cielos; mas a ellos no les es dado.

MATEO 16

28De cierto os digo que hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte, hasta que hayan visto al Hijo del Hombre viniendo en su reino.

Efectivamente muchos de ellos vieron a Jesucristo resucitado, pero a lo que se refiere el Señor es al bautismo del Espíritu Santo, el mismo que Ud. Y yo podemos disfrutar hoy, el cual recibieron en Pentecostés.

Aquellos que ya conocen a Jesús personalmente, no tienen necesidad de verle venir para creer, ya lo han recibido en sus almas, las cuales son reino de Dios.

MATEO 18

3y dijo: De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.

14Pero Jesús dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos.

LUCAS 9

62Y Jesús le dijo: Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el reino de Dios.

Este es un texto que rápidamente mide nuestra actitud y perseverancia en la vida y obra decididamente entregada a Jesús, si miramos con nostalgia a la vida anterior, cuando la mente y el corazón están apegados a las cosas que perecen, las del mundo, entonces no somos dignos del Reino de Dios.

LUCAS 16

ESTE ES UN TEXTO CLAVE

16La ley y los profetas eran hasta Juan; desde entonces el reino de Dios es anunciado, y todos se esfuerzan por entrar en él. 17Pero más fácil es que pasen el cielo y la tierra, que se frustre una tilde de la ley.

Todos los que quieran entrar en el Reino de Dios han de ser vistos por Él como cumplidores de Su Ley, para ello debemos aceptar a Jesucristo como nuestro Salvador, Quien cumple por nosotros la Ley y nos limpia de pecado, cosa que la Ley no puede hacer.

JUAN 3

ESTE ES UN TEXTO CLAVE

3Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.

El nuevo nacimiento viene por el oír la Palabra de Dios, ya que Dios envía a sus hijos a predicar el Evangelio del Reino para que se salven las almas para la eternidad. En este nuevo nacimiento interviene un cambio de la mente llamado arrepentimiento, una vez que esto ocurre, el creyente recibe unción para leer y comprender Las Escrituras.

HECHOS 14

22confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándoles a que permaneciesen en la fe, y diciéndoles: Es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios. 23Y constituyeron ancianos en cada iglesia, y habiendo orado con ayunos, los encomendaron al Señor en quien habían creído.

En efecto muchas tribulaciones pasamos por causa del Reino del Señor, pero la recompensa es mayor.

COLOSENSES 1

12con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz; 13el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, 14en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.

Por la liberación que Dios hace en nuestras vidas, desde el momento en que recibimos con gozo a nuestro Salvador, actúa en nosotros el Espíritu en el discernimiento de la luz para que sepamos distinguir lo que es de la luz y dejar aquello que es del reino de las tinieblas. Es decir, ya tenemos cualidades aquí en la tierra que son del Reino de Dios. Podemos disfrutar del Reino de Dios en nuestras vidas personales, desde nuestra estancia en la tierra antes de su establecimiento.

2 PEDRO 1

10Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme vuestra vocación y elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás. 11Porque de esta manera os será otorgada amplia y generosa entrada en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.

Eterno es el Reino de Jesucristo, aunque lo entregará al Padre, es una cuestión de dimensión no de esencia de Dios. Por ello debemos permanecer en nuestra vocación y elección.

SANTIAGO 2

5Hermanos míos amados, oíd: ¿No ha elegido Dios a los pobres de este mundo, para que sean ricos en fe y herederos del reino que ha prometido a los que le aman?

Cuan difícil es que un rico entre en el Reino de Dios. Es necesario hacerse pobre en el espíritu para venir a Dios con humildad y no tener el corazón lleno de las cosas del mundo, por eso los ricos materiales están tan llenos de los deleites que no tienen sitio para Dios, pero los pobres no tienen mucho de lo que disfrutar, por ello sus almas están humilladas y con mas posibilidad de recibir al Señor. Ahora bien esta doctrina debemos llevarla al espíritu, ya que un pobre puede tener una raíz de amargura que llene su alma, y un rico puede estar harto de lo mundano y sentirse solo y buscar a Dios.

Por nuestra parte, a todos debemos anunciar el Reino de Dios, porque Dios no hace acepción de personas.

APOCALIPSIS 12

ESTE ES UN TEXTO CLAVE

10Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha venido la salvación, el poder, y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo; porque ha sido lanzado fuera el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche. 11Y ellos le han vencido por medio de la sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, y menospreciaron sus vidas hasta la muerte.

Eh aquí el requisito para la entrada en el Reino de Dios, la victoria es por medio de Cristo en amor por nosotros.

APOCALIPSIS 17

14Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y elegidos y fieles.


¿CUÁNDO VIENE JESUCRISTO EN SU REINO?:

MATEO 24

29E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas. 30Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. 31Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.

LUCAS 17

ESTE ES EL TEXTO CLAVE

LA REVELACIÓN DE DIOS SOBRE ESTE TEMA ES QUE EL REINO DE DIOS ES JESUCRISTO MISMO, EL HIJO DEL HOMBRE.

20Preguntado por los fariseos, cuándo había de venir el reino de Dios, les respondió y dijo: El reino de Dios no vendrá con advertencia, 21ni dirán: Helo aquí, o helo allí; porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros. 22Y dijo a sus discípulos: Tiempo vendrá cuando desearéis ver uno de los días del Hijo del Hombre, y no lo veréis.

Este texto es clave para entender como Jesucristo se nos declara Él mismo como el Reino de Dios. El Reino de Dios está entre vosotros, es decir que si Jesucristo está en nosotros, el Reino está en nosotros, y así en cada uno de los hermanos.

23Y os dirán: Helo aquí, o helo allí. No vayáis, ni los sigáis.

Ahora parece que habla del Reino de Dios, pero se refiere a Su venida, por ello este texto combina el Reino con Su persona y los integra en una sola cosa, de igual modo cuando dice que Él es el pan del cielo, la luz del mundo, etc.

24Porque como el relámpago que al fulgurar resplandece desde un extremo del cielo hasta el otro, así también será el Hijo del Hombre en su día. 25Pero primero es necesario que padezca mucho, y sea desechado por esta generación. 26Como fue en los días de Noé, así también será en los días del Hijo del Hombre. 

LUCAS 23

42Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. 43Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.

Y también podemos decir que a todos los que reciben el mensaje del Reino de Dios en sus corazones, desde ese día están ya en el paraíso, espiritualmente; a partir de este momento comienza la lucha por nuestras almas, hasta que se establezca el Reino de Dios en Su venida.

APOCALIPSIS 1

7He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá, y los que le traspasaron; y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él. Sí, amén.

Si nuestro buen Señor vendrá a la luz de todos y entonces todos lamentarán no haberle amado ni recibido como el Reino de Dios que se había acercado a nosotros.

Related Media
See more
Related Sermons
See more