¿Dónde está puesta tu confianza?

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El salmo es un llamado al pueblo de Dios a poner su confianza en el Señor y no en los ídolos. Todo esto se muestra al entender que la vida no se trata de nosotros y de nuestra gloria, más bien se trata de Dios y Su gloria.

Notes
Transcript

Introducción.

Es más fácil enfocarnos en nosotros que en Dios.
Es más fácil ir tras las cosas de este mundo que las del reino de Dios.
Es más fácil confiar en ídolos que en Dios.
El ser humano es propenso a buscar todas aquellas cosas que le resulten más fácil y provechosas para si mismo. Puede que esto no sea lo más adecuado, lo más correcto pero igualmente el punto no es lo que necesita sino lo que, en su pecado, quiere.
Todos los días nos enfrentamos con la toma de decisiones. Aquellas que son sencillas como que ropa usar al despertar hasta que comida comer durante el día. Pero, de la misma manera, hay otras decisiones que son más importantes y que tienen que ver con nuestro Dios.
Tienen que ver con confiar más en Dios y menos en nosotros.
Tienen que ver con buscar más de Dios y menos de nosotros.
Tienen que ver con dedicarnos más a los asuntos de Dios que a los nuestros.

“Confiemos en nuestro Dios, no en los ídolos”.

Se que suena como, decimos muchas veces, como pan comido, sin embargo del dicho al hecho hay un gran trecho.
Pero el Salmo nos ayuda en este sentido, porque nos muestra lo primero que debemos hacer:

Resolución: Darle la gloria a Dios. (1-3).

El salmista comienza afirmando que la gloria es para Dios. …no a nosotros, Señor, no a nosotros…(v.1) No le bastó con decirlo una vez sino para resaltar su deseo, lo dice 2 veces. Psalm 115:1 (NVI): 1 La gloria, Señor, no es para nosotros; no es para nosotros sino para tu nombre, por causa de tu amor y tu verdad.
El salmista hace esto por dos razones, por el amor del Señor, y por Su verdad. Pero, ¿Qué es darle la gloria a Dios?
¿Qué es darle la gloria a Dios? Déjame decirles primero que no es:
No es solo repetir la frase muy común, “Gloria a Dios”.
No es solo cuestión de afirmar frases con nuestros labios.
No es
Darle la gloria a Dios es:
Honrarle, glorificarle, y exaltar su nombre. Esencialmente por lo que Él es (adonai) y por lo que hace.
Es vivir todo el tiempo para Él. Entendiendo que Él obra y se manifiesta acorde a su propia naturaleza llena de amor, misericordia y verdad/fidelidad.
Reconocer su soberanía en este mundo. (V.3) El es Dios y hace lo que quiere, lo que le place. ¿Quién es el ser humano para pensar que Dios no está al control? ¿Quienes somos para considerar que Dios no está en este mundo? ¿Por qué, vanamente, afirman muchos que Dios no existe, que se ha ido de este mundo?
(Ilustración).
Reconozcamos que no somos nosotros, sino Dios. No somos el centro de este mundo, no somos los protagonista de la historia, no tenemos derecho de reclamar la gloria que no nos pertenece. Hermanos, no a nosotros, no a nosotros, sino a Dios la Gloria.
Entendamos esto, tenemos motivos suficientes para dar gloria a nuestro Dios, razones suficientes para glorificarle. ¿Acaso Su misericordia no está sobre tu vida? ¿Acaso Su amor no es parte de tu vida?.
No importa cuanto digas, te preguntes y cuestiones dónde está Dios, Él está en los cielos y hace lo que quiere.
Si hoy estás aquí y eres o has sido de las personas que ha cuestionado el Dios de los cristianos, déjame decirte algo: Dios sigue y seguirá gobernando este mundo, Él seguirá llevando todo según Su plan. Ni tu razonamiento, ni el mío cambiara esa realidad.
Para el ser humano no es sabio perseguir aquello que no puede alcanzar…no es sensato que trates de alcanzar las estrellas con tu mano. No es bueno que busques tu gloria, cuando deberías buscar la gloria de Dios. Pero esta tontería no es la única que el hombre practica…hay una realidad mayor que los seres humanos abrazan y a pesar de que muchas veces se les ha dicho que es cosa estúpida, ellos persisten en ello.

Una realidad: Los ídolos no son nada. (4-8)

De ídolos está lleno el mundo. De ídolos están llenos los seres humanos. De ídolos están llenos nuestros corazones.
Para el salmista las naciones están llenas de ídolos, de ídolos que no son nada. La manera en que se ve esto es, al describirlos como sin vida, o sea muertos.
note:
son de fabricación humana.
No tienen vida. (5-7).
El punto del salmista en esta estrofa es dejarnos ver que no hay nada útil en los ídolos, más bien todo lo contrario. ¿Por qué lo digo? R: por como termina afirmando que todos se pueden volver como los ídolos (los que los hacen y confían en ellos). ¿? ¿Cómo es volverse como un ídolo en la vida?
R: Comienza con lealtad, con confianza en ellos.
Dos perspectivas desde el texto:
Volverse como ellos.
Ser semejantes.
El punto es simple: Al confiar en los ídolos, llegamos a ser como ellos, sin vida o sea, muertos.
El sarcasmo del salmista es tal que nos deja sin palabras: déjenme frasearlo de la siguiente manera: El hombre fabrica un ídolo sin vida para confiar en en él, luego ese ídolo, de alguna manera, hace que el hombre pierda todo sentido y juicio y vaya tras estos ídolos hasta el punto de perder su propia vida. O mejor dicho hasta el punto de dedicar toda su vida a estas falsedades auto-creadas por el hombre mismo.
Si alguien nos puede dar más entendimiento, sigue siendo nuestro Dios pero a través del profeta Isaías.
Isaías 44:9, 13-20.
El profeta presenta todo esto para hacer a Israel recapacitar respecto al Señor como único Dios.
Tal vez digas ¿Yo no hago eso que el profeta hace? ¿Yo entiendo lo que el salmista dice? R: Puede que tengas razón. Tu no haces ídolos a la manera tradicional que el profeta describe, pero déjame decirte que todos fabricamos ídolos a la manera moderna.
Seguro has escuchado la famosa declaración de Juan Calvino: …nuestro corazón es una fabrica de ídolos.
Incluso puede que algunos te hallan informado de algunos de estos ídolos modernos que fabricamos:
Familia (Esposo/a, Hijos/as, Padres, Madres etc…)
Pantallas (TV, PC, Celulares).
Trabajo.
Sabemos que todo aquello que ocupe nuestra atención, deleite y devoción más que Dios ha venido a ser un ídolo que hemos fabricado. En este sentido puede que muchas cosas, prácticas y pasatiempos en tu vida sea un ídolo sin darte cuenta.
El ministerio/servicio a Dios puede ser un ídolo.
Los medios de gracias pueden llegar a ser un ídolo en tu vida.
Entendamos de na vez y por todos que la idolatría es mucho más que estatuas, collares y vestidos blancos.
Examinemos nuestras vidas, hemos fabricado muchos ídolos.
¿De qué te vale confiar en dioses de hombres?
Puede que halla alguien aquí que ha tenido o tiene una historia de vida marcada por la idolatría. Si este es el caso, permíteme aconsejarle: no confíe en los ídolos, no vale la pena.
Iglesia, no pongas tu esperanza, tu confianza en falsos dioses.
Joven, anciano, hombre, mujer, deja de confiar en los ídolos.
Hermanos, mejor confiemos en el Señor….

Un llamado: Confiad en el Señor. (9-15).

La confianza en Dios es el remedio para la idolatría.
El salmista es enfático con el llamado a confiar en Dios. Le dice 3 veces al pueblo del Señor que confíen en Dios (9, 10, 11).
Israel: Todo el pueblo.
Aarón: Todo los sacerdotes (líderes)
Los que temen al Señor: (Los que viven para Dios).
No es confiar en ellos mismos, ni en los ídolos; ES CONFIAR EN EL SEÑOR.
¿Por qué deben confiar?
R: Por que Dios es el único que está a favor de ellos. Porque Dios solamente puede ayudar y proteger. En contraste con los ídolos, el Señor está activo a favor de Su pueblo.
Israel fue testigo de Dios como su ayuda y escudo.
Israel debía abandonarse al cuidado y protección de Dios. Esto debía ser constante en sus vidas. No era solo de un momento o una ocasión sino de toda la vida.
Este llamado a confiar en Dios por el simple hecho de que el Señor era ayuda y protección para Israel, los llevó a aferrarse a la promesa de bendición.
Los vv.12-15 muestra esto de forma clara y muy parecido al llamado que se ha hecho a la confianza en Dios. (Mostrar esto de forma breve y simple).
El salmista está seguro de que el Señor bendecirá:
A Israel.
A la casa de Aarón.
A los que temen al Señor.
Nunca olvidemos que el Dios en quien nosotros confiamos, es el Dios que ha bendecido, bendice y bendecirá a Su pueblo.
El salmista puede que este pensando en prosperidad (v.14) como esa bendición y lo creemos porque muchos de nosotros hemos prosperado en nuestras vidas también por causa de nuestro Dios.
Hermanos, alabamemos a aquellos que prosperan por causa de Dios. Es bíblico. Que tus hermanos crezcan espiritual y materialmente es motivo de alabanza porque no es por la fuerza de ellos sino de Dios que están así.
¿Confías en Dios? Me escuchaste bien ¿Confías en Dios? Déjame preguntártelo una vez más, ¿Confías en Dios?
Sé que muchos de ustedes lo hacen, pero necesitan seguir haciéndolo. Los que confiamos en el Señor sabemos que Él es nuestra ayuda, conocemos que Él es nuestro escudo/protección.
Hemos experimentado su cuidado y protección.
Si temes a Dios, si crees en Él, mantente confiando en su persona. No dejes que nadie, ni nada desvíe tu atención del VERDADERO ayudador y protector.
Mantente refugiandote en Dios. Créeme nadie te puede ayudar y proteger como Él.
Hermanos, Dios ha sido y es nuestra ayuda y protección, nos bendice y bendecirá… y creo que una de estas bendiciones futuras tiene que ver con una gran esperanza…una esperanza que el salmista nos deja ver en la última estrofa de este salmo.

Una gran esperanza: Vida para alabar a Dios. (16-18).

Si la vida del hombre únicamente consiste en esta vida terrenal, somos los las criaturas más desdichadas de toda las faz de la tierra. Si nuestra vida es solo cuestión del aquí y del ahora, mejor comamos, bebamos, disfrutemos de todo que mañana moriremos.
Pero este pensamiento y visión de la vida es de aquellos que no tienen a Dios; de aquellos que no tienen esperanza cierta más allá de este mundo.
Esto es lo que nos deja ver el salmista a modo de contraste en los vv.16-18.
Cielos de Dios/tierra dada a los hombres.
Los muertos, ni ninguno que desciende al silencio alaba al Señor/Israel (P.D) alabará al Señor para siempre.
La imagen del cuadro muestra dos realidades:
Sin Dios, sin esperanza, llena de soledad.
Con Dios, con esperanza, llena de comunión.
El punto es que para el salmista hay una esperanza segura de comunión con Dios que se muestra en una constante devoción a Su persona por medio de la alabanza.
Hay vida eterna con Dios. Hay comunión con Dios perpetua. Hay disfrute de Dios para siempre. El pueblo de Dios vivirá con Dios bendiciendo Su nombre para siempre. QUE GRAN BENDICIÓN.
¿Cómo es eso posible?
R: Porque nuestro Dios es Dios de vivos, no de muertos.
R: Esta vida fue traída por Cristo. De la oscuridad del pecado a la luz de la vida, de la muerte eterna a la vida eterna, del silencio del alma sombría a la alabanza del alma redimida.
Pablo lo vierte de mejor manera:
2 Timothy 1:9–10 LBLA
quien nos ha salvado y nos ha llamado con un llamamiento santo, no según nuestras obras, sino según su propósito y según la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús desde la eternidad, y que ahora ha sido manifestada por la aparición de nuestro Salvador Cristo Jesús, quien abolió la muerte y sacó a la luz la vida y la inmortalidad por medio del evangelio,
Todo lo hizo Jesús por Su pueblo, nosotros.
Alabaremos al Señor por siempre, desde ahora y por toda la eternidad. Jamás dejaremos de bendecir el nombre de nuestro Dios. Su alabanza estará de continuo en nuestros labios, mente y corazón.
Al final de los tiempos, los redimidos alabarán al Señor por siempre. Juan en Apocalipsis nos deja ver esta hermosa imagen celestial.
Revelation 19:1–8 LBLA
Después de esto oí como una gran voz de una gran multitud en el cielo, que decía: ¶¡Aleluya! La salvación y la gloria y el poder pertenecen a nuestro Dios, porque sus juicios son verdaderos y justos, pues ha juzgado a la gran ramera que corrompía la tierra con su inmoralidad, y ha vengado la sangre de sus siervos en ella. Y dijeron por segunda vez: ¡Aleluya! El humo de ella sube por los siglos de los siglos. Y los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron y adoraron a Dios, que está sentado en el trono, y decían: ¡Amén! ¡Aleluya! Y del trono salió una voz que decía: Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, los que le teméis, los pequeños y los grandes. ¶Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas y como el sonido de fuertes truenos, que decía: ¶¡Aleluya! Porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina. Regocijémonos y alegrémonos, y démosle a Él la gloria, porque las bodas del Cordero han llegado y su esposa se ha preparado. Y a ella le fue concedido vestirse de lino fino, resplandeciente y limpio, porque las acciones justas de los santos son el lino fino.
Tengamos confianza/esperanza, alabaremos a nuestro Dios después de esta vida. Lo haremos por siempre. Amén.

Conclusión.

Es demasiado fácil confiar en nosotros mismos, en personas, y cosas alrededor de nosotros. Y no estoy diciendo que no puedes confiar a nivel humano en estas cosas, pero estoy hablando de entregar todo tu ser, vida y devoción hasta el punto de tener todo esto como tu dios.
Es fácil confiar en los ídolos, es fácil fabricar estos y adorarlos; pero este no debe ser el camino a seguir.
Necesitamos confiar en Dios, en el único y verdadero Dios. Sé que no es tan simple como parece o como lo decimos pero necesitamos clamar a Dios, Él es nuestra ayuda y escudo. Él nos ha bendecido, bendice y bendecirá. El nos salva para que le alabamos por siempre.
así que, hermanos, amigos:

“Confiemos en nuestro Dios, no en los ídolos”.

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