Las bendiciones de la justificación

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Hemos sido bendecidos por medio de la obra de salvación de Jesús; que derivó en nuestra justifiación delante de un Dios perfectamente justo. El proposito del sermón es explicar 4 bendiciones que tenemos por medio de esa obra de justificación de Cristo.

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Romans 5:1–11 RVR60
Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo;por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia;y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza;y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado. Porque Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos. Ciertamente, apenas morirá alguno por un justo; con todo, pudiera ser que alguno osara morir por el bueno. Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira. Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida. Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en Dios por el Señor nuestro Jesucristo, por quien hemos recibido ahora la reconciliación.

Las bendiciones de la justificación

El pasaje en el que vamos a meditar se encuentra en la carta a los Romanos y quisiera solo dar un poco de contexto a la carta a los Romanos. Sabemos que esta carta fue escrita por el apóstol Pablo entre los año 54 y 57 d.C. La fe en la iglesia de Roma era bien reconocida, y el hecho de tener una iglesia fiel en la capital del imperio era un asunto relevante. No hay evidencia alguna de que dicha iglesia haya sido fundada por Pedro o por Pablo, sino por creyentes cuyos nombres no conocemos. Ahora bien, la iglesia tenía tanto judíos como gentiles (es decir no judíos, ni por raza prosélitos es decir judíos convertidos). en esta carta Pablo va a enfatizar la unidad de la iglesia y la salvación por gracia; la total ausencia de obras y la pura justificación por gracia.
Pablo será enfático en que lo justo, lo recto viene siempre de parte de Dios y no del hombre. Algunos de los reformadores más importantes coincidieron en que la carta a los Romanos puede ser vista como una clave que Dios dio para comprender toda la Escritura, puesto que Pablo toca los grandes temas Bíblicos en ella.
El himno que acabamos de escuchar se titula “Estoy bien”, también es conocido como “alcancé salvación” en inglés “It is well with my soul” este himno fue compuesto por un hombre de nombre Horacio Spafford quien perdió a su hijo e forma prematura, después en el gran incendió de Chicago la gran mayoría de sus bienes se perdieron dejándole en una crisis financiera muy fuerte, por lo que decidió enviar a su familia a Inglaterra, el les alcanzaría después, el barco en el que ellas iban naufraga y sus 4 hijas mueren en el naufragio, recibió un telegrama de su esposa que le decía naufragamos sólo yo me salvé. En el viaje para reunirse con su esposa, el capitán le mostró a Spafford el lugar justo donde yacían los restos de la embarcación en el que viajó su familia. Y justo ahí, en el lugar donde habían muerto sus 4 hijas, tras todos los problemas este hombre pudo escribir “Estoy bien, Tengo paz en mi ser, Gloria a Dios”
Reitero, Pablo va a enfatizar la justificación por medio de la fe por medio de Cristo únicamente.
Oración
El himno que acabamos de escuchar se titula “Estoy bien”, también es conocido como “alcancé salvación” en inglés “It is well with my soul” este himno fue compuesto por un hombre de nombre Horacio Spafford quien perdió a su hijo e forma prematura, después en el gran incendió de Chicago la gran mayoría de sus bienes se perdieron dejándole en una crisis financiera muy fuerte, por lo que decidió enviar a su familia a Inglaterra, él les alcanzaría después, el barco en el que ellas iban naufraga y sus 4 hijas mueren en el naufragio, Spafford recibió un telegrama de su esposa que le decía “naufragamos sólo yo me salvé”. En el viaje para reunirse con su esposa, el capitán le mostró a Spafford el lugar justo donde yacían los restos de la embarcación en el que viajó su familia. Y justo ahí, en el lugar donde habían muerto sus 4 hijas, tras todos los problemas este hombre pudo escribir “Estoy bien, Tengo paz en mi ser, Gloria a Dios” ¿Pero como alguien puede reaccionar así tras una etapa tan dolorosa? ¿Qué hace que un cristiano pueda afrontar cosas tan duras? Bueno, pues meditaremos en Romanos 5.1-11 para observar en donde se encuentra la confianza de las bendiciones que la justificación nos da como las vemos en:
Romans 5:1–11 RVR60
Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo;por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia;y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza;y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado. Porque Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos. Ciertamente, apenas morirá alguno por un justo; con todo, pudiera ser que alguno osara morir por el bueno. Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira. Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida. Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en Dios por el Señor nuestro Jesucristo, por quien hemos recibido ahora la reconciliación.
El pasaje en el que vamos a meditar se encuentra en la carta a los Romanos y quisiera solo dar un poco de contexto a la carta a los Romanos. Sabemos que esta carta fue escrita por el apóstol Pablo entre los año 54 y 57 d.C. La fe en la iglesia de Roma era bien reconocida, y el hecho de tener una iglesia fiel en la capital del imperio era un asunto relevante. No hay evidencia alguna de que dicha iglesia haya sido fundada por Pedro o por Pablo, sino por creyentes cuyos nombres no conocemos. Ahora bien, la iglesia tenía tanto judíos como gentiles (es decir no judíos, ni por raza prosélitos es decir judíos convertidos). en esta carta Pablo va a enfatizar la unidad de la iglesia y la salvación por gracia; la total ausencia de obras y la pura justificación por gracia.
Pablo será enfático en que lo justo, lo recto viene siempre de parte de Dios y no del hombre. Algunos de los reformadores más importantes coinciden en que la carta a los Romanos puede ser vista como una clave que Dios dio para comprender toda la Escritura, puesto que Pablo toca los grandes temas Bíblicos en ella.
Reitero, Pablo va a enfatizar la justificación por medio de la fe por medio de Cristo únicamente. Una verdad potente en esta carta es que quien tiene fe en Cristo, la justicia de Jesús recibe de forma imputada (es decir se nos da, se nos atribuye algo como sí fuéramos responsables de ello) Es decir, como sí nosotros fuéramos responsables de ser justos delante del trono de Dios. El creyente por tanto es declarado justo delante de Dios y justificado por Jesús.
Pablo será enfático en que lo justo, lo recto viene siempre de parte de Dios y no del hombre. Algunos de los reformadores más importantes coinciden en que la carta a los Romanos puede ser vista como una clave que Dios dio para comprender toda la Escritura, puesto que Pablo toca los grandes temas Bíblicos en ella.
Veamos ahora a los largo de estos 11 versículos 4 bendiciones que se van encadenando y que recibimos por ser justificados delante de Dios por Jesucristo.

1. Entrada pacífica vs 1-2

Reitero, Pablo va a enfatizar la justificación por medio de la fe por medio de Cristo únicamente. Una verdad potente en esta carta es que quien tiene fe en Cristo, la justicia de Jesús recibe de forma imputada (es decir se nos da, se nos atribuye algo como sí fuéramos responsables de ello) Es decir, como sí nosotros fuéramos responsables de ser justos delante del trono de Dios. El creyente por tanto es declarado justo delante de Dios y justificado por Jesús.
Veamos ahora en este pasaje 4 bendiciones que se van encadenando a lo largo de este pasaje y que son bendiciones que recibimos por ser justificados delante de Dios por Jesucristo.

Entrada pacífica vs 1-2

Romans 5:1–2 RVR60
Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo;por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.
La primer bendición es que tenemos una entrada pacífica. El primer elemento de esta cadena es la paz para con Dios. La realidad de la vida de un creyente y en lo que debe descansar siempre es esto hermanos. No hicimos nada, el propio Señor nos dotó de fe para creer y ser justificados por medio de nuestro Señor Jesucristo.
Y tenemos una entrada pacífica porque hemos sido justificados, y acá hay una verdad Bíblica y teológica muy importante, la Justificación que es el motor, es el porqué de estás bendiciones de las que estamos hablando suceden. La justificación es la obra que Cristo ha hecho al presentarnos como justos delante del trono Santo y Perfecto de su Padre. El veredicto para el hombre era ¡culpable!, no hay más ¡culpable! Pero, Jesucristo al pagar la deuda que el pecado nos dio con Dios, fue pagada de forma perfecta y suficiente por Jesús. Nosotros entendemos perfectamente esta palabra ¡Justificados! Cuando alguien hace algo mal, algo que no nos agrada, o se comporta de mala manera, y alguien trata de defenderlo diciendo por ejemplo -Es que él o ella no es así, seguro tuvo un problema, o andaba distraído- una respuesta común a eso es -No lo justifiques, fue grosero, o fue irresponsable- Entendemos pues, que la persona está tratando de explicar o argumentar que la persona que cometió la falta en realidad no lo hizo con una mala intención, o no obró deliveradamente. Ahora, cuando Cristo nos justifica, esa justificación se hace delante de Dios todopoderoso, eterno, que lo sabe todo; Jesús no pretende engañar a su Padre, no pretende simular que no pecamos deliberadamente, Él sabiendo que no sólo lo hacemos deliberadamente. sino con gusto; tomó nuestro lugar. Es el propio padre quien planeo esto. Esa justificación es perfecta, así empieza nuestro pasaje, JUSTIFICADOS, y fuimos Justificados por la fe en Cristo Jesús, no por ninguna obra, no por venir a la iglesia, no por ofrendar, no por portarnos bien todos los días, es más ni siquiera por levantar la mano a un llamado, ni por hacer una oración, hermanos NO, nos salvó la soberana decisión de Dios de querernos rescatar y salvar, ¿Por qué? !Quien sabe¡ Nadie sabe, porqué Dios nos escogió para salvarnos. En el plan perfecto de Dios desde antes de la fundación del mundo dice Efésios ya nos había conocido. Nada ha dependido de nosotros hermanos, todo es una obra perfecta y soberana del Señor.
El hombre desconoce a Dios, el hombre rechaza a Dios, y déjeme decirle que hay una guerra contra Dios para todo aquel que no tiene a Cristo como su Salvador. Y cualquiera diría - yo no estoy en guerra con Dios, solo pienso cosas distintas, solo hago cosas distintas, pero no tengo una guerra con Dios, es más me gusta la idea de Dios- ; pero en lo que nadie repara es que puede ser que tú no creas que estas en guerra con Dios, pero él si está en guerra contigo sí Jesucristo no es tu Salvador, porque Dios es santo, es perfecto y tiene enemistad con el pecado; amado hermano, fue hasta después de la gracia de la salvación que pudimos observar que en efecto con nuestra rebeldía nuestra soberbia, nuestra desobediencia le hacíamos la guerra a Dios, pero hoy tenemos paz.
Es decir, sí nosotros nos queríamos acercar a Dios no podíamos, en principio por que nuestra naturaleza de pecado rechaza la idea, nuestra naturaleza caída se deleita en la porquería del pecado, y segundo por que no somos bienvenidos en casa de nuestro enemigo, cuando el hombre pecó contra Dios y Pablo lo reitera en esta carta no hay quien haga lo bueno, no hay quien busque a Dios, que no podíamos solo llegar y entrar en su presencia así como así.
Pero, Dios es tan bueno, DE TAL MANERA AMÓ DIOS AL MUNDO, no dice Juan, que nos pone como justos por medio de Cristo delante del Padre; y es sólo por medio del sacrificio de Jesús que podemos ser vistos como justos. Hermano podemos estar pasando por la peor guerra, la peor lucha, el peor momento de nuestra vida y podemos descansar en que nuestro gozo y nuestra estabilidad estará en que tenemos paz con Dios.
Amado hermano está paz es una realidad objetiva, como la gravedad, no es si la sientes o no la sientes, una vez que una persona es de Cristo esta paz para con Dios.
Parte de esta misma bendición es que por la posición de paz que gozamos por la gracia de Dios es que tenemos entrada o acceso. Sabemos que antes de Cristo nadie podía mirar a Dios, nadie tenía entrada, acceso directo, sólo los sacerdotes y una vez al año; y eso sí no habían estado en contaminación etcétera; pero después de Cristo, Pablo nos recuerda que los creyentes tenemos entrada a esta gracia, la cual nos da firmeza.
En el AT los que se daban cuenta que habían visto al Ángel de Jehová es decir a Cristo pre-encarnado decían –“Hay de mí que soy muerto”- porque nadie podía ver a Dios, y les daba temor, Moisés sintió temor al acercarse, Gedeón sintió temor, muchos igual, pero a nosotros se nos dice en Hebreos 4.16 acerquemonos confiadamente al trono de la gracia. Hermano, podemos acercarnos sin miedo a morir al trono de la gracia, la posición que tenemos hoy es de Hijos que tienen acceso directo al Padre. ¡Qué enorme bendición!
Debemos recordar que el sentido de la palabra esperanza es distinto a como lo usamos hoy, la esperanza en la Biblia es una certeza absoluta. Hoy cuando decimos que tenemos esperanza de algo puede resultar algo incierto, le pongo algún ejemplo de la vida cotidiana. Cuando uno invita a alguien a alguna reunión y la persona responde espero que pueda ir, inmediatamente nos hace pensar que es posible que esa persona no asista, o cuando alguien en la escuela dice espero aprobar el examen, habla de que el resultado es incierto, de lo contrario diría se que voy a pasar el examen. Pero cuando la Biblia dice que tenemos esperanza en Dios, no se refiere a que no es seguro que Dios nos vaya a guardar, que hay una posibilidad de que eso no suceda, o que es probable que Dios nos falle, nada de eso; cuando la Biblia usa esa palabra griega que se traduce al español como esperanza, está hablando de algo que es cierto, de algo que es 100% seguro.
Entonces vemos en estos primeros dos versículos que la bendición que tenemos UNA ENTRADA PACÍFICA.
La segunda bendición que tenemos es:

2. Confianza para enfrentar la vida. vs 3-5

3Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; 4y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza; 5y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado.
Romans 5:3–5 RVR60
Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia;y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza;y la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado.
Vivir la vida cristiana en un mundo pecador y caído, no es una tarea sencilla para los llamados del Señor. Y no sólo esto, es decir, Pablo nos está reiterando en estos sientes versículos que como ya nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios, ahora nos dice que nos gloriamos en la la tribulación. La tribulaciones son aquellas situaciones que pasamos por amar al Señor, no las consecuencias de nuestro pecado, o no por una deuda que contrajimos, sino una calamidad, una injusticia, una tentación muy fuerte, aquellos asuntos que podemos observar vienen del maligno para hacernos fallar. Muchas veces decimos es que estamos pasando una fuerte tribulación por las enfermedades, o porque tuve una discusión en mi trabajo, no hermanos. Hay muchísimos pasajes que sacamos de su contexto para expresar cosas que la Biblia no está diciendo expresamente, entonces con ello claro; sabemos que al los que amamos al Señor nos vendrán pruebas por estar en un mundo pecador y caído.
Rom
Hace uno mes sí mal no recuerdo un hermano de Crossway que venía atravesando un crisis familiar por su amor al evangelio, enfrentó una tribulación, en su trabajo le pedían mentir a unos supervisores, el hermano decidió que no iba a mentir y esto le significo perder su trabajo; y no sólo eso, sino que su patrón era también quien le rentaba su departamento por lo que le pidió también desalojar el departamento, esto es una tribulación a la que Pablo se refiere aquí; cuando haceos cosas para la gloria de Dios que nos traerán presiones muy fuertes.
Sufrir embates nos muestran que estamos viviendo para Cristo, que estamos obrando para Cristo. Ahora, la tribulación es parte del ejercicio espiritual que nos va dando crecimiento. El padecer por Cristo nos lleva a tener bendiciones producidas por estas situaciones.
Hemos escuchado un sin fin de veces que –Dios tiene control de todas las cosas-, -Qué si Dios es con nosotros, ¿quién contra nosotros?-,-El Señor es nuestra justicia-, - Que la prueba es buena- y un sin fin de expresiones bíblicas o cristianas al momento de enfrentar problemas, ataques o dificultades. No obstante que cada una de esas cosas son reales y son relevantes sufrimos, nos acobardamos y sentimos temor de lo que pueda ocurrir con nosotros. Y sabe hermano esto nos ocurre porque estamos muy centrados en esta tierra, tenemos demasiado arraigo a las cosas de este mundo; y aunque sutilmente esto se da, la realidad es que nos enfocamos mucho en nuestra vida aquí.
Acá vemos el proceso de santificación y de madurez del creyente, que nos llena de confianza para enfrentar la vida. Se produce paciencia, porque aprendemos a depender del Señor y a esperar en Él, por más que nos desgastemos buscando la respuesta y la solución inmediata, la verdad es que el Señor cumple su propósito en sus tiempos y la tribulación ejercita eso en nosotros.
Hay montón de cosas que no están mal, sin embargo, nosotros las volvemos malas porque ocupan los lugares que deberían estar reservados para Dios, para su palabra, para la oración, para la comunión como iglesia, para el perdón y la reconciliación. El trabajo, la escuela, son sin duda algunos de los elementos que más nos atañen y nos afanan en la vida, por testimonio debemos ser cumplidos, y responsables pero nunca debemos permitir que nuestra escuela y nuestro trabajo interfieran con nuestra relación con Dios, nuestro crecimiento espiritual.
Esto nos lleva a ser examinados a ser probados, las pruebas en el Señor no siempre nos simples, la idea de prueba acá se asemeja a los procesos violentos de la refinación de los metales, expuestos a fuego intenso para probar su pureza. La prueba hermanos es ese proceso espiritual para probar nuestra pureza espiritual; esto no quiere decir ser perfecto, nadie de nosotros es perfecto, todos pecamos, todos fallamos, y es la obra de santificación del Señor que va obrando en nosotros; nuestra responsabilidad es dar batalla a las tentaciones, resistir, ser obedientes. Después de pasar por la tribulación, la paciencia y la prueba tenemos el gozo de la esperanza que no avergüenza. Repito esa esperanza certera, que no avergüenza porque nunca falla. Dios jamás nos avergonzará. Cristo mostró que el propósito de Dios siempre se cumple, El Señor jamás dará un solo motivo para que alguno sienta vergüenza. Y tenemos la garantía en que Dios nos amó y nos ama, su amor fue derramado, el creyente posee el amor divino.
La bendición se tener certeza para enfrentar la vida radica en que el amor de Dios ha sido derramado y el Espíritu Santo mora en nosotros, y no nos abandona jamás. El Espíritu Santo nos guía, mora en nosotros y exhorta a nuestro espíritu con el amor de Dios. Que mejor forma de enfrentar la vida, que sabiendo, que Dios mismo se ha vertido su amor sobre nosotros, esto no quiere decir, que no tengas miedo, preocupaciones; pero, es un ancla de seguridad con el que podemos enfrentar las adversidades.

3. La bendición de una amor incomparable. vs 6-8

Romans 5:6–8 RVR60
Porque Cristo, cuando aún éramos débiles, a su tiempo murió por los impíos. Ciertamente, apenas morirá alguno por un justo; con todo, pudiera ser que alguno osara morir por el bueno. Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.
Este es el evanagelio. El hombre no tiene nada bueno dentro de sí, no importa cuantas filosofías engañen con esto, ¿cómo entender que hay un mundo malo y perverso con gente buena en su esencia y en su interior? No nos dejemos engañar, si fuéramos buenos no necesitaríamos un Salvador, pero la verdad contundente irrenunciable es que necesitamos un Salvador desesperadamente. Nuestra debilidad era tal que nos era imposible acercarnos a Dios. Un puerco no anhela algo más allá del chiquero, porque no conoce otra cosa, y retoza ahí, se llena de lodo, esa es la condición del borracho, del drogadicto, del calumniador, del mentiroso, del perverso, del maligno, de nosotros. De ti y de mi, y Dios vio nuestra condición en que siendo débiles, sin posibilidad de estirar la mano, el mando a Jesucristo y murió por los impíos. No murió por los que tienen bondad dentro, no por lo potencialmente buenos; NO, el murió por lo peor, por lo más bajo, por los perdidos, por los pecadores.
El amor de Dios y la muerte sacrificial de Cristo es la cosa más complicada de entender para mí. Y Pablo lo dice acá magistralmente, morir por un justo hace sentido, si yo tuviera que morir, moriría seguramente por un científico que pudiera traer avance en la medicina, por un artista que alegre el alma de la gente, por una persona filantrópica, pero por el ladrón, por el narcotraficante, por el malvado, seguramente yo diría, no, porque voy a entregar o sacrificar mi vida por alguien que no hace nada bueno, por el contrario pura cosa mala, bueno hermanos esa es la incomprensión de la cruz. Alguien, algunos tendían lógica, sí murieran por un justo por un bueno, PERO DIOS MUESTRA SU AMOR PARA CON NOSOTROS, EN QUE SIENDO AÚN PECADORES CRISTO MURIÓ POR NOSOTROS. Hermano esta verdad me hace decir ante los problemas soy bendecido, porque amado hermano estamos bien, que problema, que amenaza puede cambiar esta contundente realidad. ¡Ninguna! Claro que vamos a enfrentar problemas, claro que vamos llorar, claro que vamos a sufrir, pero nada puede cambiar el hecho de que Dios mostró su amor sacrificando a su Hijo amado en la cruz por nosotros.
Te molestan, estas sin empleo, estas en un problema, tienes problemas económicos, enfermedad, incertidumbre, vuelve a recordar que Tú eres un impío y Dios muestra su amor en que murió por ti. ¿Qué pasa ahora? ¿cómo está tu corazón? Cristo murió por nosotros, Gloria a Dios. Todo mundo responde bien, siempre, ¿Cómo estás? Bien responde la gente, pero sabes el creyente deber responder estoy bien, Gloria a Dios, Tengo paz, tengo certeza, siendo malo Cristo murió por mí, ¿Cómo podría estar, si no es bien?

4. El regalo de la Salvación reconciliadora. vs 9-11

Romans 5:9–11 RVR60
Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira. Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida. Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en Dios por el Señor nuestro Jesucristo, por quien hemos recibido ahora la reconciliación.
Vamos cerrando hermano. Cristo derramó hasta la última gota de su sangre amado hermano, justificados en su sangre. La ira venidera es real, es cierta, todos los que se entregaron a su pecado, llorarán cuando Dios sea manifestado y vean lo que ha pasado. Hoy los medios, la vida diaria muestran al pecado abierto. Anuncios en la calle, drogas, corrupción, pecados sexuales de toda índole, y saben que dicen los “avanzados” que seamos tolerantes, cada quien su vida, bueno, un día el cielo se abrirá y verán que Dios es real, y querrán matarse y la muerte huirá de ellos, y por adoración o por terror pero toda rodilla se va a doblar delante de Dios, y muchos pedirán clemencia, pero será tarde, busquen a Dios mientras pueda ser hallado dice el profeta.
Pero los creyentes fuimos reconciliados con Dios por medio de nuestro Señor Jesús. Y seremos salvos porque Él vive, realmente vive. Él fue levantado de los muertos, y por eso Esteban soportó las piedras en su cuerpo procurándole la muerte, porque vio a Cristo a la diestra del Padre sabiendo que su confianza y su esperanza estaba depositada en la roca firme de la esperanza. En esa esperanza que no avergüenza, y miró al cielo y clamó por ellos porque la certeza es que seremos salvos por su vida.
Hermanos, hemos sido hermosamente reconciliados, y nos gozamos nos gloriamos en Dios porque en su amor envió a Cristo para que fuéramos reconciliados. En esta tierra nosotros tenemos de que gloriarnos, y es de la obra de Cristo en la Cruz para reconciliarnos. Amados, Estamos bien, podemos cantar con gozo que ya venga la prueba, o nos tiente Satán no amengua ni nuestra fe ni nuestro amor, pues Cristo comprende nuestras luchas y nuestro afán y su sangre obrará en nuestro favor. Y podremos vivir en medio de los problemas y de los embates sabiendo que la fe se tornará en gran realidad , desciende Jesús con su gran majestad, Aleluya estamos bien con nuestro Dios, por la obra perfecta de Jesús.
Hermanos a lo largo de este hermoso pasaje hemos podido observar como Dios en su amor, preparó bendiciones para nosotros por medio de la obra hermosa de nuestro Señor Jesús, fuimos justificados en Él. Y esa justificación nos bendijo con 1. Una entrada pacífica al trono de gracia de Dios, 2. con confianza para enfrentar la vida, 3. con la bendición de un amor incomparable y 4. con el regalo de la salvación conciliadora.
¿Qué tenían en común estos hombres? Cuantas veces ante los problemas nos ponen de ejemplo a estos personajes y nosotros decimos, bueno pero no me pidas ser así, yo no soy Pedro, yo no soy Pablo (por algo ellos aparecen en la Biblia y yo no) pero la Biblia nos recuerda que estos hombres eran hombres absolutamente ordinarios, La Iglesia tradicional los mete en un catálogos de santos para alejarlos, ponerlos en un escalón más alto que el resto de las personas, pero, nosotros sabemos que todos ellos eran seres humanos brutalmente convencionales; entonces repito la pregunta, ¿Qué tenían estos hombres? ¿De qué estaban hechos? ¿Por qué resistían así?
Y la respuesta es muy simple, tenían todos sus sueños, sus anhelos, sus energías, sus deseos en la patria celestial. Así de simple, no solo decían sino que vivían que en esta tierra estamos de paso y que nuestra verdadera ciudadanía está en los cielos. Un hermano me dijo este es el momento de prueba y por tanto el momento de meditar en la vida eterna, y no lo entendí hasta hace unas semanas. Lo que hacía que estos hombres de Dios no titubearan, y pudieran enfrentar embates bestiales en sus vidas, en sus cuerpos, en sus mentes era tener TODO PUESTO EN LAS COSAS DE ARRIBA. Saber que Cristo los salvó y que nada los puede arrebatar de su mano. Alex siempre nos dice que le propongamos pasajes para ponerles música, acá está en mío en Romanos 5. 1-11 pueden salir 2 o 3 lindos cantos. Así que meditemos en esta mañana en este pasaje para poder “estar bien”
Oración.
Nuestro pasaje de esta mañana está hilado de una forma hermosa y tenemos una cadena de certezas que nos arraigan, nos unen a nuestro Señor y Salvador como sus hijos, como sus rescatados.
Dios es tan bueno, que nos pone como justos por medio de Cristo delante del Padre. Hermano podemos estar pasando por la peor guerra, la peor lucha y nuestro gozo y nuestra estabilidad estará en que tenemos paz con Dios.
Amado hermano está paz es una realidad objetiva, como la gravedad, no es si la sientes o no la sientes, una vez que una persona es de Cristo esta paz o esta ausencia de guerra es absoluta en su vida.
Hermanos vamos a fallar en pecado, en duda, en amargura, pero la Gracia de Dios es mucho más poderosa. Y nos ponemos alegres, con gozo, con júbilo por que nuestra esperanza está puesta en la gloria de Dios. Recordar que el sentido de la palabra esperanza es distinto a como lo usamos hoy, la esperanza en la Biblia es una certeza absoluta. Tengo esperanza de pasar la materia y el papá se quiere morir, porque no está seguro de pasar. Pero cuando la Biblia dice que tenemos esperanza en Dios, no se refiere a que no es seguro que Dios nos vaya a guardar, es una certeza absoluta.
Acá vemos el proceso de santificación y de madurez del creyente. Se produce paciencia, porque aprendemos a depender del Señor y a esperar en Él, por más que nos desgastemos buscando la respuesta y la solución inmediata, la verdad es que el Señor cumple su propósito en sus tiempos y la tribulación ejercita eso en nosotros. Esto nos lleva a ser examinados a ser probados, las pruebas en el Señor no siempre nos simples, la idea de prueba acá se asemeja a los procesos violentos de la refinación de los metales, expuestos a fuego intenso para probar su pureza. La prueba hermanos es ese proceso espiritual para probar nuestra pureza espiritual. Después de pasar por la tribulación, la paciencia y la prueba tenemos el gozo de la esperanza que no avergüenza. Repito esa esperanza certera, que no avergüenza porque nunca falla. Dios jamás nos avergonzará. Cristo mostró que el propósito de Dios siempre se cumple, El Señor jamás dará un solo motivo para que alguno sienta vergüenza. Y tenemos la garantía en que Dios nos amó y nos ama, su amor fue derramado, el creyente posee el amor divino. Otro elemento de esta cadena es que el amor de Dios ha sido derramado y el Espíritu Santo mora en nosotros, no nos abandona jamás. El ES no guía mora en nosotros y exhorta a nuestro espíritu con el amor de Dios.
El amor de Dios y la muerte sacrificial de Cristo es la cosa más complicada de entender para mí. Y Pablo lo dice acá magistralmente, morir por un justo hace sentido, si yo tuviera que morir, moriría seguramente por un científico que pudiera traer avance en la medicina, por un artista que alegre el alma de la gente, por una persona filantrópica, pero por el ladrón, por el narcotraficante, por el malvado, seguramente yo diría, no, porque voy a entregar o sacrificar mi vida por alguien que no hace nada bueno, por el contrario pura cosa mala, bueno hermanos esa es la incomprensión de la cruz. Alguien, algunos tendían lógica, sentido si murieran por un justo por un bueno, PERO DIOS MUESTRA SU AMOR PARA CON NOSOTROS, EN QUE SIENDO AÚN PECADORES CRISTO MURIÓ POR NOSOTROS. Hermano esta verdad me hace decir ante mis problemas “Estoy Bien” porque amado hermano estamos bien, que problema, que amenaza puede cambiar esta contundente realidad.
Te molestan, estas sin empleo, estas en un problema, tienes problemas económicos, enfermedad, incertidumbre, vuelve a recordar que Tú eres un impío y Dios muestra su amor en que murió por ti, ¿Qué pasa ahora? ¿cómo está tu corazón? Cristo murió por nosotros, Gloria a Dios. Todo mundo responde bien, siempre, ¿Cómo estás? Bien responde la gente, pero sabes el creyente deber responder estoy bien, Gloria a Dios, Tengo paz, tengo certeza, siendo malo Cristo murió por mí, ¿Cómo podría estar, si no es bien?
Pero los creyentes fuimos reconciliados con Dios por medio de nuestro Señor Jesús. Y seremos salvos porque el vive, realmente vive. El fue levantado de los muertos, y por eso Esteban soportó las piedras en su cuerpo procurándole la muerte, porque vio a Cristo a la diestra del Padre sabiendo que su confianza y su esperanza estaba depositada en la roca certera. En esa esperanza que no avergüenza, y miró al cielo y clamó por ellos porque la certeza es que seremos salvos por su vida.
Hermanos, hemos sido hermosamente reconciliados, y nos gozamos nos gloriamos en Dios porque en su amor envió a Cristo para que fueramos reconciliados. En esta tierra nosotros tenemos de que gloriarnos, y es de la obra de Cristo en la Cruz para reconciliarnos. Amados, Estamos bien, podemos cantar con gozo que ya venga la prueba, o nos tiente Satán no amengua ni nuestra fue ni nuestro amor, pues Cristo comprende nuestras luchas y nuestro afán y su sangre obrará en nuestro favor. Y podremos vivir en medio de los problemas y de los embates sabiendo que la fe se tornará en gran realidad , desciende Jesús con su gran majestad, Aleluya estamos bien con nuestro Dios.
[1] Reina Valera Revisada (1960). 1998. Miami: Sociedades Bı́blicas Unidas.
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