Yo soy la Puerta de las Ovejas

Yo soy la Puerta de las Ovejas

Juan 10:7-10

Introducción:

Jesús proclamaba ser la puerta de las ovejas.

Hay un cuadro descriptivo de Jesús como la puerta.

Cuando las ovejas eran apacentadas en las afueras por la noche, estaban en los barrancos rodeados por varias paredes rocosas.

Naturalmente, la abertura en estos barrancos no tenía ninguna puerta por ningún lado.

El pastor mismo era la puerta literalmente, porque durante la noche se tendía sobre la abertura.

Las ovejas podrían salir solamente pasando él, y los enemigos de las ovejas podrían entrar solamente pasando a través de él. El acceso hacia adentro o hacia afuera estaba era solamente a través del pastor.

I.       Jesucristo es la única puerta de las ovejas.

            “7 Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas. 8 Todos los que antes de mí vinieron, ladrones son y salteadores; pero no los oyeron las ovejas.” Juan 10:7-8 (RVR)

A.          De cierto, de cierto os digo.

No hay nada más verdadero que lo que estoy a punto de decirles.

                  Jesucristo es la única puerta de acceso al Padre

                           “porque por medio de él los unos y los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre.” (Efesios 2.18, RVR60)

                  Jesucristo es la única entrada al mismo cielo.

                           “En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros.” (Juan 14.2, RVR60)

La puerta está siempre abierta para todo el que quiera entrar en ella.

B.           Otros son ladrones y salteadores.

No se está refiriendo a los profetas que claramente anunciaron su venida y obra.

Se está refiriendo a aquellos que asumieron el papel de mediadores haciéndose ellos mismo la puerta.

C.           Las ovejas no los oyeron.

Los verdaderos creyentes en Cristo no reconocen la voz de nadie más que El.

II.     Jesucristo es la única puerta hacia la salvación.

            “9 Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos.” Juan 10:9 (RVR)

A.          Las ovejas serán salvas y tendrán seguridad.

1.            Serán salvas del pecado a través de Jesucristo.

“pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado.” (1 Juan 1.7, RVR60)

2.            Estarán tan seguros en sus manos que no habrá nada ni nadie quien podrá arrebatarlas de sus manos.

“Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.” (Juan 10.29, RVR60)

B.           Las ovejas tendrán libertad.

“y entrará y saldrá” ya sea por alimento o descanso.

Estas ovejas gozaran la libertad de los hijos de Dios.

C.          Las ovejas encontrarán buena alimentación.

“y hallará pastos.”

Pastos significa provisión.

Esta puede ser provisión espiritual y/o provisión material.

Estas ovejas encontraran satisfacción completa en Cristo y su salvación.

Encontrarán la llenura de su ser.

III.    Jesucristo es la única puerta a una vida abundante.

            “10 El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.” Juan 10:10 (RVR)

A.          Los fariseos seguían un camino que llevaba al pueblo judío a la ruina espiritual.

Tenían un monopolio de influencia sobre las mentes de los judíos.  Obtenido a base de triquiñuelas y mantenido de la misma manera.

Corrompían el corazón de la gente hasta producir en ellos insensatez y muerte  espiritual.

De tal manera que la gente estaba completamente perdida y a estos religiosos no les importaba ni lo más mínimo.

Esto es lo que el diablo quiere, el quiere robar, matar y destruir tu vida.

B.           Jesucristo siguió un camino que le garantizaba al pueblo vida y vida en abundancia.

Jesucristo es el que da vida a las almas muertas.

“Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás. Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos)” (Efesios 2.1-5, RVR60)

Jesucristo es el que hace posible que tu vida sea una vida amplia en todas las áreas posibles.  Tu vida será amplia en gracia, en bendición, en gozo, en gloria, y en felicidad desde ahora y para siempre.

Jesucristo te quiere dar vida.

La vida que Jesucristo te ofrece es eterna y abundante.

Conclusión:

“Jehová es mi pastor; nada me faltará.

En lugares de delicados pastos me hará descansar;

Junto a aguas de reposo me pastoreará.

Confortará mi alma;

Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.

Aunque ande en valle de sombra de muerte,

No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo;

Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.

Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores;

Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando.

Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida,

Y en la casa de Jehová moraré por largos días.” (Salmos 23, RVR60)