Juan 1:19-28
Notes
Transcript
Introducción
Hola amigos, es una bendición compartir con ustedes mientras avanzamos por el evangelio de Juan. La semana pasada, vimos que Cristo Jesús es Dios, el Dios que creó el cielo y la tierra.
En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho. - Juan 1:1-3
Y este mismo Dios vino a la tierra como nuestro sustituto para que podamos tener restauración y vida eterna con Él.
Humanidad estaba muerto en sus deleites y pecados, sin poder de hacer un sacrificio suficiente de pagar por sus pecados y tener la rectitud suficiente delante de Dios para que disfrutara amistad y paz con Él.
Jesús tomó nuestro lugar, vivía como hombre obediente delante de Dios, murió en la cruz de recibir el castigo de Dios que merecemos, y se levantó de los muertos el tercer día para demostrar que Dios Padre aceptó su pago.
Por fé en Cristo y su obra, podemos tener como regalo la rectitud de Él para que seamos justos delante de Dios. ¿Y nuestros pecados? Clavados a la cruz de Cristo, pagados 100% y borrados. Pero la persona que rehúsa creer en Cristo aún tiene la ira de Dios sobre él o ella (Jn. 3:36).
También, aprendimos de Juan El Bautista, el primo de Jesús, un profeta que tenía la responsabilidad de proclamar la venida del Mesías Prometida de Los Judíos y salvador del mundo.
Esta semana, enfocaremos en el testimonio publico de Juan a los demás acerca de la identidad divino de Jesús. Recuerden, el propósito de este evangelio es que, según Juan 20:31,...qué creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.
Conexión
Y una vez más, mi deseo es que si tú eres creyente, que este estudio te ayude aferrar más en Cristo y su evangelio para que puedas vivir como un discípulo que hace otro discípulos. Y si tu no eres creyente, espero que encuentras en este estudio la grandeza de Cristo Jesús y su gracia que él te ofrece. Solo Él puede salvarte de tus pecados y rebelión contra Dios y restaurarte en amistad y vida con propósito centrada en él.
Leer Juan 1:19-28
19 Este es el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron de Jerusalén sacerdotes y levitas para que le preguntasen: ¿Tú, quién eres?
20 Confesó, y no negó, sino confesó: Yo no soy el Cristo.
21 Y le preguntaron: ¿Qué pues? ¿Eres tú Elías? Dijo: No soy. ¿Eres tú el profeta? Y respondió: No.
22 Le dijeron: ¿Pues quién eres? para que demos respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices de ti mismo?
23 Dijo: Yo soy la voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor, como dijo el profeta Isaías.
24 Y los que habían sido enviados eran de los fariseos.
25 Y le preguntaron, y le dijeron: ¿Por qué, pues, bautizas, si tú no eres el Cristo, ni Elías, ni el profeta?
26 Juan les respondió diciendo: Yo bautizo con agua; mas en medio de vosotros está uno a quien vosotros no conocéis.
27 Este es el que viene después de mí, el que es antes de mí, del cual yo no soy digno de desatar la correa del calzado.
28 Estas cosas sucedieron en Betábara, al otro lado del Jordán, donde Juan estaba bautizando.
Oración
¿En tu vida, has encontrado alguien que es orgulloso y egoísta?
Podría ser alguien en su equipo de fútbol.
Podría ser un compañero en sus clases.
Podría ser un vecino, o un miembro de la familia.
Podría ser alguien que conociste en la iglesia.
Uno de mis mejores amigos es un fanático de fútbol, como la mayoría de ustedes. Hace pocos años, estábamos mirando un partido, y empezamos de hablar a cerca de un jugador se llama Zlatan Ibrahimovic. Él jugaba para Manchester United, y ahora yo pienso que él está jugando para AC Milan en Italia. Nos dimos cuenta cuan arrogante y orgulloso él era, y recién busqué algunas citas de él para que ustedes entiendan lo que estoy diciendo.
Por ejemplo:
Una vez, alguien le preguntó a él si comprara o no un regalo para su prometida después de proponer matrimonio. Él respondió: “¿Regalo? Ella no necesita un regalo porque ya recibió Zlatan. Yo soy el mejor regalo que ella pudiera pedir.”
"No puedo evitar reírme de lo perfecto que soy."
Juan el Bautista no era Zlatan Ibrahimovic. Él era alguien con mucha humildad, que entendía su posición delante de Dios y su responsabilidad de enfatizar Jesús como el Hijo de Dios, el Mesías Prometido.
19 Este es el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron de Jerusalén sacerdotes y levitas para que le preguntasen: ¿Tú, quién eres? 20 Confesó, y no negó, sino confesó: Yo no soy el Cristo. 21 Y le preguntaron: ¿Qué pues? ¿Eres tu Elías? Dijo: No soy. ¿Eres tú el profeta? Y respondió: No.
Juan el Bautista tenía una reputación. Él estaba predicando un mensaje de arrepentimiento delante de Dios, y haciendo bautizos de arrepentimiento. Él era alguien que vivía en el desierto, se vestía en ropa rara, y comía cosas raras (alguien leer por favor Mateo 3:1-6). Y por eso, los líderes religiosos querían saber quién era él. Ellos le preguntaron:
¿Eres el Cristo, el Mesías prometido? Juan el Bautista les respondió: no.
¿Eres tu Elías? No. ¿Quién era Elías?
¿Eres tú el profeta? No. Dt. 18:15-19, obviamente él era profeta pero no era el último profeta, el profeta principal - Cristo Jesús.
22 Le dijeron: ¿Pues quién eres? para qué demos respuesta a los que nos enviaron. ¿Qué dices de ti mismo? 23 Dijo: Yo soy la voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor, cómo dijo el profeta Isaías. 24 Y los que habían sido enviados eran de los fariseos.
Los líderes religiosos no recibían de Juan una respuesta afirmativa acerca sus preguntas, hasta que Juan dijo: Dijo: Yo soy la voz de uno que clama en el desierto: Enderezad el camino del Señor, como dijo el profeta Isaías.
Este es una cita del Antiguo Testamento, en Isaías 40:3, en la cual habla acerca de la buena obra que Dios iba a hacer en medio del pueblo de Israel.
¿Alguien puede leerla por favor?
Voz que clama en el desierto: Preparad camino a Jehová; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios. Todo valle sea alzado, y bájese todo monte y collado; y lo torcido se enderece, y lo áspero se allane. Y se manifestará la gloria de Jehová, y toda carne juntamente la verá; porque la boca de Jehová ha hablado.
Juan está diciendo, ¡Yo soy esta voz! ¡Yo solo soy el mensajero que está preparando la llegada de Mesías de Israel, nuestra esperanza!
25 Y le preguntaron, y le dijeron: ¿Por qué, pues, bautizas, si tú no eres el Cristo, ni Elías, ni el profeta? 26 Juan les respondió diciendo: Yo bautizo con agua; mas en medio de vosotros está uno a quien vosotros no conocéis. 27 Este es el que viene después de mí, el que es antes de mí, del cual yo no soy digno de desatar la correa del calzado. 28 Estas cosas sucedieron en Betábara, al otro lado del Jordán, donde Juan estaba bautizando.
Los líderes religiosos querían saber por qué él estaba bautizando. Como hemos aprendido, Juan hacía bautizos para demostrar arrepentimiento de pecado en la luz de la llegada del Mesías. ¿Qué significa arrepentimiento de pecado? Juan contestó su pregunta de bautizo, pero otra vez, enfatizó la persona que iba a venir, el Mesías. Juan les dijo que ellos no le conocían al Mesías, a pesar de que él estaba preparando de revelar si mismo delante de sus ojos. También, Juan, en humildad, exclamó que a pesar de que El Mesías - siendo Dios - iba a venir después de él en términos de su ministerio publico - que El Mesías siempre ha existido y por eso era antes de Juan. Juan dijo que él no era digno de desatar la correa del calzado. ¡Qué humildad! Yo no puedo imaginar algo tan humilde como desatar la correa del calzado de alguien. Y de esa acción, Juan dijo, “Yo no soy digno de desatar la correa del calzado. Él está en un nivel tan diferente y alto que yo.”
Conexión
Amigos queridos, ¿qué es orgullo? ¿Cómo se define orgullo? ¿Cómo se define humildad?
El Diccionario de Oxford se define orgullo así:
Exceso de estimación hacia uno mismo y hacia los propios méritos por los cuales la persona se cree superior a los demás.
El Diccionario de Oxford se define humildad así:
Que no hace ostentación de sus virtudes.
Si yo fuera un futbolista, y como nuestro ejemplo en el principio - Zlatan - y digo que “Yo soy el mejor futbolista en el mundo. Los demás jugadores no son desafíos para mí.” ¿Que demostraría con el comportamiento mío? Orgullo.
Yo tendría una estimación hacía yo mismo y hacia mis méritos por los cuales creería que soy superior. Y podemos cambiar el ejemplo en el ámbito de belleza física, de éxito en la escuela, y en nuestras profesiones.
Pero si fuera un futbolista humilde, yo diría, “Yo estoy agradecido por el éxito que yo he tenido en la cancha, pero yo sé que mis dones solo vienen de Dios.” Yo estaría demostrando humildad, porque no hice ostentación de mis virtudes.
Amigos, Juan sabía quién él era delante de Dios mismo. Él sabía que era ser humano, alguien quien Dios creó, y alguien con la tarea de predicar el mensaje de Cristo y apuntar a la gente hacia a su Mesías. Humildad viene cuando nos damos cuenta cuán grande y majestuoso es nuestro Dios, y que nosotros somos seres humanos, creaciones de Él (Gen. 1:27-31).
A pesar de que somos seres humanos, y no Dios, la verdad es que La Biblia nos dice que de toda la creación que Dios hizo, los seres humanos fueron los únicos que Él hizo en su imagen, con dignidad, con la tarea de ser portadores de Él y cultivar la creación como una manera de alabanza a Dios.
¿Qué Pasó?
La serpiente - Satanás - les ofreció Adán y Eva la oportunidad de ser sus propios dioses. O sea, reemplazar la adoración de Dios verdadero con adoración de sí mismos. Obviamente, fue una mentira, porque nosotros no somos Dios.
Y en este sentido, hermanos, orgullo fue el primer pecado, porque orgullo es cualquier actitud del corazón en la cual estamos olvidando quien es Dios, y quienes somos nosotros.
Cristo vino para liberarnos de nuestra adicción a egoísmo y orgullo. Porque gozo y contentamiento verdadero solo vienen cuando nosotros vivimos el diseño que Dios creó para nosotros: gente con dignidad, en El Imagen de Dios, con el privilegio de amar a Él en el primer lugar, y por medio de este amor, podemos amar y servir a los demás.