La Alabanza, recurso en la Crisis

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Introducción
Uno de los reclamos mas comunes que escuchamos permanentemente en los noticiarios y la comunidad de internet es la falta de recursos para contrarrestar la pandemia que nos azota. No hay país del mundo que no haya elevado su clamor por mas guantes, mascarillas y ropa de protección. Equipos de ventilación, medicamentos y aun personal medico es insuficiente. En nuestros paises donde los niveles de pobreza y corrupción son mas altos el problema es mas agudo.
Pero que de aquellos recursos que nos permiten mantenernos luchando firmes en medio de las adversidades y las tribulaciones,
¿Es usted una persona que esta recibiendo la provisión espiritual necesaria en esta crisis?
Ninguna colección de poemas ha ejercido tanta influencia en nuestras vida como el libro de los Salmos.
Las personas que adoran y oran al Señor en diferentes períodos históricos se han identificado tan profunda y espiritualmente con esta literatura, que han tomado las plegarias y alabanzas de los salmos, y las han articulado y repetido en medio de diferentes experiencias de su vida.
1 Pagán, S. (2007). Commentario De Los Salmos (p. 11). Miami, FL: Editorial Patmos.
Estos poemas bíblicos, que a la vez son oraciones y plegarias ante Dios, revelan lo más profundo de nuestros sentimientos, emociones y pensamientos y nos permiten establecer un dialogo divino - humano donde son evidentes nuestras necesidades y la respuesta de Dios a ellas.
Me he sentido llamado a meditar en ellos y ser guiado a las fuentes donde Dios hace provisión para los que le buscan.
En este día quiero invitarles a leer uno de los salmos mas hermosos del Salterio, un salmo de alabanza y gratitud, el salmo 34
Mi propósito es que al meditar en el, usted sea suplido de todo el bien que necesita para salir victorioso en esta crisis.

I. Una invitación a la alabanza

Salmo 34.1–3 RVR60
1 Bendeciré a Jehová en todo tiempo; Su alabanza estará de continuo en mi boca. 2 En Jehová se gloriará mi alma; Lo oirán los mansos, y se alegrarán. 3 Engrandeced a Jehová conmigo, Y exaltemos a una su nombre.
Uno de los medios mas notorios en los cuales el pueblo de Dios adquiere fuerzas para derrotar al enemigo es la Alabanza, mientras David huia de Saul, escribió este salmo para exaltar a Dios quien le libro aun morando en medio de sus enemigos los filisteos.
La primera sección de este salmo exalta a Dios por su poder, su misericordia, su grandeza.
Bendecimos su nombre, nos gloriamos en El, exaltamos su nombre, esto es alabanza.
Asi que, aquí esta una invitación para que en medio de las circunstancias que estamos pasando, siempre nos reunamos para alabar, aunque no podemos hacerlo en un mismo lugar, de manera diferente, si podemos hacerlo, poniéndonos de acuerdo en el tiempo, el motivo y el propósito de nuestra alabanza.
Podemos unirnos al salmista David, que aunque separados por el tiempo y la distancia, nuestros corazones esten dispuestos para agradecer a Dios.
No hay circunstancia en la cual no sea pertinente y aplicable la alabanza a Dios.
La alabanza a Dios debe ser una experiencia continua por encima de las circunstancias que vivimos.

II. La alabanza a Dios nos anima a confiar en Dios

Eso es lo que declara David de los versículos 4 -8
Salmo 34.4–7 RVR60
4 Busqué a Jehová, y él me oyó, Y me libró de todos mis temores. 5 Los que miraron a él fueron alumbrados, Y sus rostros no fueron avergonzados. 6 Este pobre clamó, y le oyó Jehová, Y lo libró de todas sus angustias. 7 El ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen, Y los defiende.
La alabanza nos anima en la crisis porque a través de ellas recordamos los hechos maravillosos de Dios en nuestras vidas.
David alaba a Dios en quien siempre encuentra la provisión cuando se encuentra en dificultad, en su salmo el dice de Dios lo siguiente:
Lo Alabo porque el me libró de todos mis temores
Lo alabo porque me aparta de la verguenza
Lo alabo porque me libra de todas mis angustias
Lo alabo porque siempre me defiende
No es formidable que mientras adoramos a Dios, su Espíritu nos libere de los temores de un futuro que no conocemos porque el Dios que adoramos lo conoce, su paz nos inunde disipando las angustias de los caminos peligrosos que transitamos y tengamos la convicción que su cuidado protector esta presente en todo tiempo en nuestras vidas.
Que en este tiempo de dificultad en alabanza busquemos a Jehova, miremos a El, Clamemos en su nombre y permanezcamos en su presencia y veremos como el nos provee.

III. La Alabanza nos hace mas conciente de nuestro deber con Dios y el projimo

Cuando alabamos a Dios, nuestro corazón es dirigido a El en acciones que le son de su total agrado. La alabanza nos encamina a hacer su voluntad.
En la tercera sección el salmista hace tres invitaciones a manifestar actitudes de un verdadero adorador
Salmo 34.8–11 RVR60
8 Gustad, y ved que es bueno Jehová; Dichoso el hombre que confía en él. 9 Temed a Jehová, vosotros sus santos, Pues nada falta a los que le temen. 10 Los leoncillos necesitan, y tienen hambre; Pero los que buscan a Jehová no tendrán falta de ningún bien. 11 Venid, hijos, oídme; El temor de Jehová os enseñaré.

La alabanza nos lleva a la experiencia de profundizar en la bondad de Dios.

La alabanza nos lleva a la experiencia de vivir en el Temor de Dios.

La alabanza nos lleva a la experiencia de conocer el temor de Dios.

IV. La Alabanza revela nuestro nivel de relación con Dios.

Del versículo 15 en adelante se establece una diferencia entre los justos y los que hacen mal.
Salmo 34.15–22 RVR60
15 Los ojos de Jehová están sobre los justos, Y atentos sus oídos al clamor de ellos. 16 La ira de Jehová contra los que hacen mal, Para cortar de la tierra la memoria de ellos. 17 Claman los justos, y Jehová oye, Y los libra de todas sus angustias. 18 Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; Y salva a los contritos de espíritu. 19 Muchas son las aflicciones del justo, Pero de todas ellas le librará Jehová. 20 El guarda todos sus huesos; Ni uno de ellos será quebrantado. 21 Matará al malo la maldad, Y los que aborrecen al justo serán condenados. 22 Jehová redime el alma de sus siervos, Y no serán condenados cuantos en él confían.
Y aquí se nos muestra como Dios no ofrece quitar todas las circunstancias negativas de nuestra vida, pero si ofrece tratarnos completamente diferente si le alabamos de todo corazón a El.
Vea usted cual es la actitud de Dios hacia aquellos que ama, porque los ha justificado:
Sus ojos y sus oídos están atentos sobre ellos.
Esta cercano a ellos cuando están quebrantados y contritos de espíritu.
El guarda a sus escogidos
El redime a sus siervos.
La alabanza que Dios recibe viene de un corazón que el ha redimido con su sangre, justificado por su gracia, escogido para ser llamado su hijo, hecho cercano por medio de la obra reconciliadora de su amor.
Quiero invitarte a que en medio de cualquier circunstancia bendigas el nombre de Dios, con todo tu ser le glorifiques y exaltes su grandeza, seguro que el responderá tu alabanza con provisión de todo bien.