Quitemos la Levadura
Notes
Transcript
Introducción
Introducción
Pensemos en una sociedad donde hay un mal que se encuentra en todos los hogares:
Hombres casados con más de una mujer
Mujeres que tienen más de un hombre que dicen ser su marido
Hombres que tienen una esposa y varías concubinas
Niños y niñas que esclavos que sirven solo para satisfacer los deseos bajos de sus amos.
…pareciera que estamos hablando de una de las grandes ciudades del mundo: San Francisco, Nueva York, Singapur, Ciudad de México, Rio de Janeiro, etc.
Ahora imaginemos que el evangelio de Jesucristo llega a una sociedad que vive así.
Imaginemos que llega un hombre llamado Pablo, que dice haber sido llamado por el Cristo resucitado.
Ese predicador llega al centro de la ciudad predicando que todo aquel que cree en Cristo es hecho una nueva criatura.
Ese mismo predicador comienza a hablar del nuevo nacimiento, de una vida transformada, del poder de la resurrección, etc.
Imaginemos que la gente comienza a venir a los pies de Jesucristo.
La gente comienza a arrepentirse de sus pecados.
Las personas que antes vivían en la oscuridad de sus pecados, sus ojos ahora han sido abiertos a la luz del evangelio.
¿…la pregunta es que van a hacer ahora que son creyentes?
¿Cómo van a vivir aquellos que tenían más de una esposa?
¿Cómo van a vivir los que visitaban los templos paganos a practicar la prostitución ritual con las sacerdotisas del templo?
¿Cómo van a vivir los hermanos que a lo que nosotros llamamos inmoralidad sexual para ellos era lo más normal del mundo?
En nuestra jornada por 1 Corintios Pablo se encuentra con un caso muy difícil en la congregación - un hombre estaba casado con su madrastra.
Es increíble pensar que un caso así se estuviera viviendo en la vida de una congregación Cristiana.
Pero, no olvidemos de la sociedad de la cual estaban saliendo todos los hermanos de Corinto.
Hoy consideraremos:
El problema
La solución
La razón
El problema
El problema
En nuestro tiempo no se acostumbran las cartas escritas a mano.
Yo aún recuerdo como mi mamá enviaba dinero a México y incluía una carta con saludos para mi abuela o mis tías.
¿Qué contiene una carta?
Saludos
Un relato de los acontecimientos recientes de la familia
En ocasiones se piden perdón
En otros casos se aprovecha el tiempo para confesar algún secreto familiar
Otros usan una carta para confrontar a un ser querido
En 1 Corintios 5 Pablo destapa uno de los problemas mas graves que estaba viviendo la congregación de Corinto.
En efecto, se oye que entre ustedes hay inmoralidad, y una inmoralidad tal como no existe ni siquiera entre los Gentiles, al extremo de que alguien tiene la mujer de su padre.
Recordemos que todos habían sido paganos.
Muchos de los hombres en la congregación habían acudido a las prostitutas sagradas de los templos de la ciudad.
La sociedad miraba como algo muy normal el libertinaje sexual.
Pero en esta congregación había un caso que era considerado vergonzoso aun entre los no-creyentes / paganos.
Había un hombre que tenía la mujer de su padre.
No sabemos si el padre había muerto o aún vivía.
No sabemos si era su madre en carne o madrastra (me inclino a que era madrastra porque se le identifica como “la mujer de su padre” y no su madre.
No sabemos si era la esposa de su padre o solo una de sus muchas concubinas.
¿Pero qué es lo que está sucediendo?
Uno de los miembros de la congregación tiene como mujer a la mujer de su padre.
Están practicando el pecado de incesto.
Este es un mal tan horrendo que Pablo puede ver que ni siquiera se práctica entre una sociedad tan inmoral como la de los Corintios.
Es un mal que hasta los Corintios lo miraban como algo sucio, bajo, horrendo.
No sabemos si estas dos personas habían estado practicando este pecado desde antes que él fuera creyente o después.
De hecho, no creo que la mujer era creyente porque cuando Pablo habla de las consecuencias (expulsión) se refiere solo al hombre y no a la mujer (v. 2 y v. 13).
Sea cual sea el momento en que comenzó a practicar este pecado, lo que sabemos es que era una ofensa grave / pecado horrendo ante los ojos de Dios ya que el incesto es una abominación ante los ojos del Señor (Lev 18:8, Deut 22.30).
La Biblia nos dice que el pecado sexual ya sea adulterio, fornicación, poligamia, incesto, etc., es grave porque es un pecado contra nuestro mismo cuerpo.
Huyan de la fornicación. Todos los demás pecados que un hombre comete están fuera del cuerpo, pero el fornicario peca contra su propio cuerpo.
Cuando practicamos estos pecados estamos deshonrando nuestros mismos cuerpos.
Estamos haciendo violencia contra el cuerpo que Dios nos ha dado y quizá por esto es que hay tantas consecuencias físicas y emocionales cuando cometemos esta clase de pecados.
Sin embargo, este pecado era solo un síntoma del verdadero problema que plagaba a la congregación. Pablo los exhorta diciendo:
¡Y ustedes se han vuelto arrogantes en lugar de haberse entristecido, para que el que de entre ustedes ha cometido esta acción fuera expulsado de en medio de ustedes!
Los hermanos en lugar de actuar sabiendo que lo que estaba sucediendo iba contra las normas y principios de la palabra de Dios no habían hecho nada.
Se paralizaron pensando que toda iba a estar bien.
La Biblia nos dice que se volvieron arrogantes en lugar de entristecerse al ver como un hermano de la congregación había caído en un pecado tan bajo.
La congregación, al ver este pecado, tenían que haber doblado sus rodillas y clamar al Dios del cielo para que el hermano se arrepintiera de su falta.
Pero los hermanos hicieron caso omiso y no hicieron nada al respecto.
La solución
La solución
Por tanto, Pablo como apóstol de Dios tiene que hacer algo.
Pues yo, por mi parte, aunque ausente en cuerpo pero presente en espíritu, como si estuviera presente, ya he juzgado al que cometió tal acción.
En el nombre de nuestro Señor Jesús, cuando estén reunidos, y yo con ustedes en espíritu, con el poder de nuestro Señor Jesús,
entreguen a ese tal a Satanás para la destrucción de su carne, a fin de que su espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús.
Pablo mira este caso y aunque está lejos va a actuar según como debía haber actuado la congregación.
Pablo no lo hace de forma unilateral (por sí mismo) sino lo hace de acuerdo a los principios Bíblicos.
Por eso Pablo dice: “En el nombre de nuestro Señor Jesús, cuando estén reunidos, y yo con ustedes en espíritu, con el poder de nuestro Señor Jesús”.
Lo que va a hacer Pablo / la determinación que va a dar Pablo va de acuerdo con el testimonio de las Sagradas Escrituras que es la Palabra de Dios.
Pablo lo hace no por su propia autoridad sino lo hace por el mismo poder de Dios.
La sentencia que da Pablo parece ser cruel o exagerada.
Si lo miramos así es porque no entendemos la gravedad del pecado.
Mas bien, debemos ver la sentencia como una demostración de la gravedad de la ofensa que se estaba cometiendo contra Dios.
Pablo dice que la persona que estaba cometiendo ese pecado debería ser “entregado a Satanás para destrucción de su carne, a fin de que su espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús.”
La sentencia que se estaba aplicando era sacar a esa persona de la comunión de la iglesia local.
A partir de ese momento no se le consideraba miembro de la congregación, no se le consideraba un creyente, no se le consideraba parte del cuerpo de Cristo.
Se le está expulsando de la congregación según el versículo 13.
Este es un principio que vemos desde el Antiguo Testamento:
Adán y Eva cuando pecaron fueron expulsados del huerto.
Caín cuando mató a su hermano Abel salió huyendo de delante de la presencia de Dios.
Cuando había un ofensor (e.g., rebelde a los padres, hechicero, o un leproso) debía ser sacado fuera del campamento y excluido del pueblo.
Esa persona estaba dando testimonio que no quería vivir bajo las normas de Dios y por lo tanto perdía la seguridad de vivir dentro de la seguridad de la comunidad del pueblo de Dios.
Esa persona era dejada a la merced de las bestias y el clima.
Esa persona ya no vivía bajo la protección del resto del pueblo de Dios.
Esa persona no podía recibir los beneficios de ser pueblo de Dios cuando demostraba mediante sus actos que no estaba dispuesto a vivir como el pueblo de Dios.
La razón
La razón
Todos estamos expuestos a pecar.
Sin embargo hay ciertas faltas que no suceden de la noche a la mañana.
Un hombre no decide de la noche a la mañana a engañar a su esposa con otra mujer.
Una mujer no decide de un día a otro dejar a su esposo e hijos y seguir a otro hombre.
Estos son pecados premeditados que llevan días, semanas, meses, y quizá años planeándose esperando el momento perfecto.
Es en estos casos que nosotros debemos exhortar a la persona a arrepentirse de su falta, a confesar su pecado delante de Dios, y si se rehusa hacerlo es necesario que sea expulsado de la comunidad de la iglesia local.
Esto quiere decir que ya no disfruta las bendiciones y beneficios de ser miembro de la iglesia local y que debe ser tratado como un no-creyente que necesita escuchar el evangelio de Jesucristo.
De hecho en el versículo 11 Pablo nos da un poco más de información acerca de como debe ser el trato con estas personas:
Sino que en efecto les escribí que no anduvieran en compañía de ninguno que, llamándose hermano, es una persona inmoral, o avaro, o idólatra, o difamador, o borracho, o estafador. Con esa persona, ni siquiera coman.
Pablo nos dice que personas que dicen ser hermanos pero son inmorales, avaros, idólatras, etc., son personas con las cuales no debemos tener compañía.
De hecho, se nos pide no comer ni siquiera con estas personas.
Esto no quiere decir que nos les vamos a hablar.
Lo que significa es que no vamos a llevar una vida social con ellos ya que convivencia con ellos podría hacerlos pensar que todo está bien y que su relación con Dios está bien, cuando en realidad están lejos de Dios.
La santidad de Dios exige que creamos que esta es la voluntad de Dios.
Dios es un Dios santo y nos dice en su palabra:
Porque escrito está: “Sean santos, porque Yo soy santo.”
Esto nos lleva a la razón que Pablo da por lo cual debemos actuar de esta manera:
La jactancia de ustedes no es buena. ¿No saben que un poco de levadura fermenta toda la masa?
Limpien la levadura vieja para que sean masa nueva, así como lo son en realidad sin levadura. Porque aun Cristo, nuestra Pascua, ha sido sacrificado.
Por tanto, celebremos la fiesta no con la levadura vieja, ni con la levadura de malicia y maldad, sino con panes sin levadura de sinceridad y de verdad.
Pablo usa el ejemplo de la levadura.
Un poco de levadura es suficiente para leudar toda la masa.
En mi caso, se necesitan solo 7 gramos de levadura para leudar 500 gramos de masa.
Pablo quiere que los hermanos vean el pecado que hay en la congregación como la levadura que viene a leudar toda la masa.
Con el tiempo no solo será el hombre que estará ofendiendo a Dios sino que atacará a toda la congregación.
El hecho de que ellos no están haciendo nada para evitar que ese hombre siga contaminando la santidad y pureza de la iglesia local nos indica que la congregación había bajado la guardia contra el pecado.
El pueblo de Dios estaba siendo afectado por la misma indiferencia contra la santidad y el amor / atracción hacía el pecado.
Pablo recuerda la practica de los judíos antes de celebrar la Pascua.
Los judíos limpiaban sus cocinas / hogares de toda levadura.
De la misma manera ahora Pablo los exhorta a hacer lo mismo - a examinar sus propias vidas y librarse de la levadura del pecado.
Sabemos que la levadura simbolizaba el pecado porque en el versículo 8 Pablo se refiere a la levadura “de malicia y maldad”.
Hoy Pablo nos exhorta a cada uno de nosotros a examinarnos y despojarnos de toda maldad.
Sin embargo, Pablo no confía que lo podremos hacer por nuestras propias fuerzas.
Pablo está consciente que como seres mortales somos incapaces de hacer esta obra en nosotros mismos - ¿cúanta gente quiere dejar los vicios, o ciertos pecados y no pueden?
Por eso Pablo dirige nuestra mirada hacía el Señor Jesucristo:
Limpien la levadura vieja para que sean masa nueva, así como lo son en realidad sin levadura. Porque aun Cristo, nuestra Pascua, ha sido sacrificado.
Primero Pablo dice que somos masa sin levadura.
El creyente no es masa leudada.
El creyente es masa sin levadura.
…pero con el pasar del tiempo hemos permitido que la levadura del pecado nos afecte y entre en nuestras vidas.
…algo sucedió en nuestras vidas que pasamos a ser masa sin levadura.
…por tanto Pablo dice limpien sus vidas de la levadura que no les corresponde porque ustedes como creyentes son masa sin levadura.
¿Cómo es que llegamos a ser masa sin levadura?
Por la obra de Cristo en nuestras vidas.
Cristo nuestra Pascua fue sacrificado.
Cristo dio su vida en la cruz de tal manera que todo aquel que cree en el él es hecho una nueva criatura.
Satanás ya no tiene autoridad ni poder sobre nosotros.
Dios nos ha librado del yugo de servidumbre del pecado.
No tenemos porque vivir debajo del yugo del enemigo.
Somos libres del poder del pecado.
Cristo nos ha redimido y nos ha hecho nueva criatura.
Todo es por la obra de Cristo en la cruz.
Es por eso que nosotros podemos despojarnos porque somos libres.
Hermanos, esto quiere decir que el principio de nuestra vida cristiana descansa sobre la obra de Cristo en la cruz y el transcurso de nuestra vida cristiana también descansa y depende de la obra bendita de Cristo.
Por tanto, celebremos esta realidad y seamos esa masa sin levadura viviendo alejados de la malicia y maldad y viviendo en sinceridad y verdad.
Por tanto, celebremos la fiesta no con la levadura vieja, ni con la levadura de malicia y maldad, sino con panes sin levadura de sinceridad y de verdad.