La Vida Conyugal Cristiana

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Introducción

Es interesante ver el interés que muestra la gente sobre las relaciones y matrimonios de los famosos:
Millones de personas miró por televisión las bodas de William y Kate y también de Harry y Meghan.
Son personas de la realeza británica.
No son hispanos.
No son nuestras familias, y aun así hubo gran interés en el vestido, el pastel, el adorno, los invitados, los votos, etc.
Muchas personas leen las últimas revistas y programas de farándula para ver quién anda con quién y quienes ya se ha divorciado.
Otros ven el matrimonio como un concepto anticuado que solo sirve para reprimir a las personas.
Unos dicen que no necesitan un papel (acta matrimonial) para demostrar el amor que tienen a su pareja.
Otros prefieren no contraer un compromiso que luego va a requerir un abogado / proceso legal para disolver / terminar (e.g., divorcio).
También vemos que la edad para contraer matrimonio, entre los que aun se casan, va aumentando.
En los 1900 la edad promedio era 22.
Ahora la edad promedio es de 27-28 años.
La gente está esperando más tiempo para casarse.
Muchas personas prefieren vivir juntas que contraer una obligación formal - el matrimonio.
La Iglesia de Corinto se encontraba en una sociedad caracterizada por libertinaje en cuanto al tema del matrimonio.
1 Corinthians 6:9 NBLH
¿O no saben que los injustos no heredarán el reino de Dios? No se dejen engañar: ni los inmorales, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales,
En este pasaje vemos mencionado varios pecados a causa de una devaluación o menosprecio de la relación matrimonial establecida por Dios.
El matrimonio es una creación divina que Dios mismo instituye en Génesis 2:24 cuando casa a la primera pareja:
Genesis 2:20–24 NBLH
El hombre puso nombre a todo ganado y a las aves del cielo y a todo animal del campo, pero para Adán no se encontró una ayuda que fuera adecuada para él. Entonces el Señor Dios hizo caer un sueño profundo sobre el hombre, y éste se durmió. Y Dios tomó una de sus costillas, y cerró la carne en ese lugar. De la costilla que el Señor Dios había tomado del hombre, formó una mujer y la trajo al hombre. Y el hombre dijo: “Esta es ahora hueso de mis huesos, Y carne de mi carne. Ella será llamada mujer, Porque del hombre fue tomada.” Por tanto el hombre dejará a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.
Es en esta escena donde aprendemos que:
El matrimonio es una creación de Dios.
El matrimonio se define como la unión / compromiso mutuo de un hombre y una mujer.
El matrimonio implica la creación de una familia nueva donde ambos, hombre y mujer, se separan de su familia anterior para formar un nuevo hogar.
El matrimonio es una unión mental, espiritual, y física.
Estos principios tan básicos los vemos revelados desde el primer libro de la Biblia. Pero, la sociedad de los corintios vivía en rebelión contra Dios; al igual que nuestra sociedad moderna mediante:
La fornicación - la relación intima antes del matrimonio.
El adulterio - la relación intima de parte de una persona casada con alguien que no es su esposo(a).
El homosexualismo - las relaciones entre personas del mismo género, hombre con hombre o mujer con mujer.
Pablo no era un hombre reprimido ya que él había visto estos pecados y cosas aún más sorprendentes dentro de la sociedad de los corintios.
Pero, Pablo sabía que aunque en la congregación habían muchos que llevaban estas vidas antes de conocer el evangelio de Cristo - pero ahora eran nuevas criaturas en Cristo Jesús - por el poder del Espíritu Santo.
1 Corinthians 6:11 NBLH
Y esto eran algunos de ustedes; pero fueron lavados, pero fueron santificados, pero fueron justificados en el nombre del Señor Jesucristo y en el Espíritu de nuestro Dios.
Ahora lo que necesitaba la iglesia era ser instruida en cuanto a la voluntad de Dios para la vida matrimonial / conyugal.
Hoy Pablo, por inspiración del Espíritu Santo, nos lleva a considerar:
Existen beneficios en ser soltero
Las bendiciones del matrimonio
El deber matrimonial

Los beneficios de ser soltero

Notemos como inicia Pablo:
1 Corinthians 7:1 NBLH
En cuanto a las cosas de que me escribieron, bueno es para el hombre no tocar mujer.
1 Corinthians 7:8 NBLH
A los solteros y a las viudas digo que es bueno para ellos si se quedan como yo.
Pablo mira a los hermanos que habían visto vidas de fornicación, adulterio, incesto, y demás y dice: hermanos, mejor es quedarse soltero, buscar a Dios, y servirle sólo a él.
Podemos decir que Pablo tenía mucha razón en presentar esta opción para los creyentes, sobre todo estos hermanos que vivían en una sociedad donde abundaba la inmoralidad.
Así que no debemos ver como algo raro o extraño que una persona no se case o que no tenga interés por el matrimonio.
Más adelante Pablo resume el beneficio de quedarse soltero:
1 Corinthians 7:26 NBLH
Creo, pues, que esto es bueno en vista de la presente aflicción; es decir, que es bueno que el hombre se quede como está.
1 Corinthians 7:32–33 NBLH
Sin embargo, quiero que estén libres de preocupación. El soltero se preocupa por las cosas del Señor, cómo puede agradar al Señor. Pero el casado se preocupa por las cosas del mundo, de cómo agradar a su mujer,
Pablo sabía que la iglesia estaba sufriendo persecución. A esto se refiere cuando habla “de la presente aflicción”.
Pablo sabe como los creyentes eran perseguidos a causa de su fe en Cristo.
Dentro de muy poco tiempo se desataría una gran persecución en el imperio romano.
Pablo mismo quien había sido perseguidor de la iglesia sabía como separaba a las familias; esposos de sus esposas y padres de sus hijos.
Por tanto Pablo dice: hermanos, es mejor quedarse soltero como yo.
Luego, vemos que Pablo menciona algo muy importante.
El soltero solo se preocupa por agradar a Dios.
El soltero no tiene ninguna otra obligación sino enfocarse en agradar a Dios en su día a día.
En cambio, el que está casado tiene la obligación de mantener un hogar, criar hijos, trabajar para el sostén del hogar, y sobre todo como agradar a su coyugue.
El casado tiene muchas responsabilidades en mente.
El casado tiene su atención dividida porque tiene muchas preocupaciones en este vida, aparte de su devoción a Dios.
Nota: jóvenes, tomen buenas decisiones. El matrimonio es una gran responsabilidad. Muchos jóvenes fracasan cuando pretenden formar un hogar porque olvidan el trabajo que se requiere. Olvidan la responsabilidad que requiere mantener una familia y hogar.

Las bendiciones del matrimonio

Por tanto, tenemos la opción de casarnos o quedarnos solteros. La realidad es que la mayoría de los seres humanos vamos a contraer matrimonio. Así que Pablo ahora da instrucción para todos los que estamos casados o que algún día nos casaremos:
El matrimonio nos ayuda a apartarnos de la inmoralidad.
El matrimonia requiere entrega mutua.
El matrimonio nos ayuda a apartarnos de la inmoralidad.
Pablo dice:
1 Corinthians 7:2 NBLH
No obstante, por razón de las inmoralidades, que cada uno tenga su propia mujer, y cada una tenga su propio marido.
En medio de una sociedad donde abunda el libertinaje sobre todo en asuntos de la vida intima - Pablo dice que la vida matrimonial nos ayuda a apartarnos del pecado / inmoralidad.
En este aspecto, Pablo tiene un enfoque muy particular en cuanto a la vida intima del hombre y la mujer.
Esto nos dice que la sexualidad del hombre y la mujer son parte del plan divino.
Nos dice que la atracción entre un hombre y una mujer son parte del plan divino.
Nos dice que el matrimonio es el lugar donde el hombre y la mujer pueden disfrutar la plenitud de la vida intima sin verguenza y sin temor - ya que es parte del plan de Dios.
Es quizá por esto que Pablo menciona:
1 Corinthians 7:9 NBLH
Pero si carecen de dominio propio, cásense. Que mejor es casarse que quemarse.
Sería mejor casarse que quedarse soltero y estar cometiendo toda clase de fornicación (con esto se refiere al “quemarse”) o ser condenado (que también podría referirse con “quemarse”).
Pero, también esto nos dice que la vida intima fuera del contexto matrimonial es una ofensa a la santidad de Dios que no solo ofenda a Dios sino que contamina nuestra vida moral, espiritual, y física.
Esta declaración de Pablo sería algo sorprendente para los corintios que querían vivir sus vidas de acuerdo a las normas de la sociedad.
Sin embargo, el creyente vive de acuerdo a las normas establecidas por Dios, porque él es nuestro Señor, ni de acuerdo a las normas de este mundo.
Por tanto, los que estamos casados creamos que el deleite de la vida conyugal es parte del plan de Dios, no hay impureza en el acto matrimonial.

El deber matrimonial

Ahora notemos lo que Pablo nos dice en cuanto a la vida conyugal:
1 Corinthians 7:3–4 NBLH
Que el marido cumpla su deber para con su mujer, e igualmente la mujer lo cumpla con el marido. La mujer no tiene autoridad sobre su propio cuerpo, sino el marido. Y asimismo el marido no tiene autoridad sobre su propio cuerpo, sino la mujer.
Pablo se refiere al la vida conyugal de manera muy particular.
El hombre no debe negarse a sí mismo a su mujer ni la mujer debe negarse a sí misma a su marido.
Los corintios vivían en una sociedad muy machista donde solo los hombres tenían derechos. Las mujeres no eran más que propiedad.
Pero, Pablo por inspiración del Espíritu Santo inicia refiriéndose al marido de no negarse al marido.
Muchos esperaríamos que dijera primero que la mujer no debía negarse a su marido.
Sin embargo, aquí vemos que ante los ojos de Dios tanto el hombre como la mujer son de igual valor.
El hombre no es más que la mujer.
La mujer no es más que el hombre.
Ambos son creación de Dios y de igual valor y dignidad ante los ojos de Dios.
La vida intima es el enfoque particular de Pablo. Sin embargo, la realidad es que la vida íntima es solo una pequeña parte de la vida conyugal.
1 Corinthians 7:3 NBLH
Que el marido cumpla su deber para con su mujer, e igualmente la mujer lo cumpla con el marido.
La vida conyugal requiere amor, respeto, cuidado, honra, comprensión, paciencia.
La vida conyugal requiere poner los intereses del conyuge como prioridad.
La vida conyugal requiere mostrar que valoramos a la persona con quién estamos casados.
Cada uno de nosotros tenemos una deuda con el esposa/o que Dios nos ha dado.
Muchas veces decimos:
Es que usted no conoce a mi esposa/o.
Es que usted no sabe lo difícil que es mi matrimonio.
…en parte si lo puedo comprender porque en un matrimonio tenemos un pecador casado con una pecadora.
Somos imperfectos.
Somos humanos.
Estamos llenos de faltas y deficiencias.
…sin embargo, el creyente que ha sido redimido por Dios tiene el poder por el Espíritu Santo de poder ser una esposa/o conforme a la voluntad de Dios.
El matrimonio funciona de una manera bíblica cuando nos damos cuenta que tenemos un deber hacía nuestro coyugue.
Es por esto que la unión libre es una falta ante Dios porque no existe ningún compromiso legal, mucho menos la aceptación que tenemos un deber hacía la pareja.
De repente existen parejas que se han acostumbrado a faltarse el respeto, humillarse el uno al otro ante la gente, discusiones continuas, pleitos a diario, etc. No han comprendido que se tienen un deber de respetarse, edificarse y no destruirse, tolerarse, y ser pacientes.
La Palabra de Dios nos exige, nos demanda a cumplir el deber que tenemos con nuestro conyugue y así reflejar el amor de Dios hacía su iglesia.

Conclusión

El matrimonio es una demostración / un cuadro vivo de lo que es la relación de Dios con su iglesia.
Notemos lo que la Biblia nos dice:
Ephesians 5:25–27 NBLH
Maridos, amen a sus mujeres, así como Cristo amó a la iglesia y se dio El mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado por el lavamiento del agua con la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia en toda su gloria, sin que tenga mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuera santa e inmaculada.
Cristo es el esposo y la iglesia es la novia.
Así como Cristo amó a la iglesia, es necesario que el marido ame a su esposa.
Así como la iglesia honra a Cristo es necesario que la iglesia honre a su marido.
…Cristo amó a una iglesia que falla, que en ocasiones es infiel, que es imperfecta y aún así dio su vida en la cruz del Calvario por ella.
Por tanto no podemos tener la mentalidad que nosotros no tenemos el mismo deber.
Pensemos en nuestros hijos:
¿Cómo van a aprender del amor de Cristo a su iglesia cuando sus padres viven en constante conflicto - suponiendo que el matrimonio nos ayuda a ver el amor de Dios pro su iglesia?
Hermanos, permitamos que Dios obre en nuestro matrimonio de tal manera que mediante nuestra vida conyugal podamos glorificar a Dios y testificar de la bondad de Dios.
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