¿Miedo a la verdad?
Imita al Mejor!! • Sermon • Submitted
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· 11 viewsEn esta predica no nos centraremos en la Homosexualidad, sino en la manera que Jesús hubiera reaccionado ante esta personas, asi como todo aquel pecador, no enfocándonos en ser jueces pero si imitarlo en mostrarles la verdad con ayuda del Espiritu Santo.
Notes
Transcript
»Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a Su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en Él, no se pierda, sino que tenga vida eterna.
Oración:
Introducción:
Continuando con la serie, veremos el comportamiento que debemos tener ante situaciones de nuestro día a día, tomando como base a nuestro máximo ejemplo y modelo a seguir, Jesús.
Actualmente observamos como la gente nos etiqueta fácilmente con peyorativos como el ser hipócritas, el día de hoy hablaremos de la homofobia, aunque no es el tema principal nos ayudará a entender lo que Dios ha preparado para esta ocasión.
Cuando leemos los evangelios, nos preguntamos:
¿Jesús fue homofóbico?
Resulta curioso que en ninguno Evangelio, veamos a Jesús expresar una frase o enseñanza sobre el tema, algo sumamente llamativo porque la homosexualidad era un fenómeno bastante extendido en la cultura greco-romana de su tiempo. Los poetas la ensalzaban en sus obras; la sociedad la toleraba como un hecho habitual; y Palestina estaba rodeada e impregnada de esa cultura.
Los términos «homosexualidad» y «homosexual» son impresiones del siglo XIX d.C., y no tienen equivalente en hebreo o griego antiguos. Es discutible si la idea moderna de homosexualidad existió en absoluto en la antigüedad.
Homosexualidad: Es el comportamiento sexual caracterizado por la atracción o actividad erótica centrada y única, de forma exclusiva o dominante, hacia personas del mismo sexo. Este comportamiento se da tanto en los varones como en las mujeres, si bien en el segundo caso suele denominarse lesbianismo.
La problemática de la homosexualidad implica consideraciones biológicas, psicológicas, sociales, culturales y religiosas.
¿Qué dijo Jesús sobre la homosexualidad?
Predicación:
Jesús enfatiza el matrimonio monógamo, heterosexual y de por vida.
»Pero desde el principio de la creación, Dios los hizo varón y hembra. »Por esta razón el hombre dejará a su padre y a su madre, y los dos serán una sola carne; así que ya no son dos, sino una sola carne. »Por tanto, lo que Dios ha unido, ningún hombre lo separe».
* Buscar otras versiones
En este pasaje podemos ver tres cosas que hace énfasis Jesus acerca del matrimonio como debe de ser:
Heterosexual, Jesús dijo: “Hombre y mujer los creó”.
Aunque en los Evangelios no vemos que Jesús se exprese de manera enfática sobre este homosexualidad, si vemos que se enfoca en la constitución del matrimonio en su diseño original y perfecto.
Desde esta perspectiva, las Escrituras consideran a la homosexualidad como pecado de desobediencia a Dios y transgresión de su voluntad revelada.
Aunque no leemos encuentros de Jesús con personas homosexuales, eso no significa que no existieran, pero debe haberse encontrado con todo tipo de personas con inmoralidad sexual.
Monógamo en una cultura polígama.
Monógamo. persona que esta casado con un solo cónyuge o mantiene relaciones sexuales con una sola persona.
Polígama. Que está casado al mismo tiempo con dos o más cónyuges o mantiene relaciones sexuales con varias personas.
De por vida en medio de una cultura que por todo se divorciaba.
Levantándose de allí, Jesús se fue* a la región de Judea y al otro lado del Jordán; y se reunieron* de nuevo las multitudes junto a Él, y una vez más, como acostumbraba, les enseñaba. Se acercaron algunos fariseos, y para poner a prueba a Jesús, le preguntaban si era lícito a un hombre divorciarse de su mujer. «¿Qué les mandó Moisés?», les dijo Jesús. Ellos respondieron: «Moisés permitió al hombre escribir carta de divorcio y repudiarla». Entonces Jesús les dijo: «Por la dureza del corazón de ustedes, Moisés les escribió este mandamiento.
Jesús en ninguna parte de las Escrituras lo vemos atacando ni necesitaba atacar a los homosexuales de su tiempo, sino enfatizaba el modelo bíblico del matrimonio, monógamo, heterosexual y de por vida.
Entonces, ¿es para Jesús pecado la homosexualidad?
Para el contexto hebreo en el que Jesús se desenvolvía, Sí.
”No te acostarás con varón como los que se acuestan con mujer; es una abominación.
”Si alguien se acuesta con varón como los que se acuestan con mujer, los dos han cometido abominación; ciertamente han de morir. Su culpa de sangre sea sobre ellos.
»Ninguna mujer de Israel será ramera de culto pagano; tampoco ninguno de los israelitas será sodomita de culto pagano. »No traerás la paga de una ramera ni el sueldo de un perro a la casa del Señor tu Dios para cualquier ofrenda votiva, porque los dos son abominación para el Señor tu Dios.
Y esto no significa que esté o debemos estar a favor de esta orientación sexual, no, pero Jesús no vive atacando a estas personas. Así mismos nosotros.
Hoy muchos cristianos:
No son monógamos, porque miran pornografía, coquetean con otras personas que no es su esposo o esposa, tienen sexo fuera del matrimonio y viven vidas inmorales. O se andan divorciando por pequeñeces. Pero, sin embargo se dedican a atacar a personas con diferente orientación sexual.
Jesús trata a todos los pecadores con amabilidad y gracia.
¿Tuvo Jesús alguna interacción con algún homosexual?
Ni los Evangelios o las Escrituras refieren de algun encuentro o relación de Jesús con algún homosexual, pero si la historia cuenta que la gran mayoría de los reyes y gobernadores romanos tenia relaciones homosexuales.
La cultura romana aceptaba con naturalidad la homosexualidad, el emperador Nerón fue el primero en casarse con un hombre y algunos emperadores tenían de amantes a hombres.
Jesús fue llevado delante del gobernador, y este lo interrogó: «¿Eres Tú el Rey de los judíos?». «Tú lo dices», le contestó Jesús. Al ser acusado por los principales sacerdotes y los ancianos, nada respondió. Entonces Pilato le dijo*: «¿No oyes cuántas cosas testifican contra Ti?» Jesús no le respondió ni a una sola pregunta, por lo que el gobernador estaba muy asombrado.
«¿Eres Tú el Rey de los judíos?», le preguntó Pilato. «Tú lo dices», respondió* Jesús. Y los principales sacerdotes lo acusaban de muchas cosas. De nuevo Pilato le preguntó: «¿No respondes nada? Mira de cuántas cosas te acusan» Pero Jesús no respondió nada más; de modo que Pilato estaba asombrado.
Pilato preguntó a Jesús: «¿Eres Tú el Rey de los judíos?». «Tú lo dices», le respondió Jesús. Entonces Pilato dijo a los principales sacerdotes y a la multitud: «No encuentro delito en este hombre» Pero ellos insistían, diciendo: «Él alborota al pueblo, enseñando por toda Judea, comenzando desde Galilea hasta aquí»
Pilato volvió a entrar al Pretorio, y llamó a Jesús y le preguntó: «¿Eres Tú el Rey de los judíos?». Jesús respondió: «¿Esto lo dices por tu cuenta, o porque otros te lo han dicho de Mí?». Pilato contestó: «¿Acaso soy yo judío? Tu nación y los principales sacerdotes te entregaron a mí. ¿Qué has hecho?» Jesús le respondió: «Mi reino no es de este mundo. Si Mi reino fuera de este mundo, entonces Mis servidores pelearían para que Yo no fuera entregado a los judíos. Pero ahora Mi reino no es de aquí». «¿Así que Tú eres rey?», le dijo Pilato. «Tú dices que soy rey», respondió Jesús. «Para esto Yo he nacido y para esto he venido al mundo, para dar testimonio de la verdad. Todo el que es de la verdad escucha Mi voz». Pilato le preguntó*: «¿Qué es la verdad?». Y habiendo dicho esto, salió otra vez adonde estaban los judíos y les dijo*: «Yo no encuentro ningún delito en Él.
Al leer estos versículos podemos ver a Jesús frente a Pilato, pero en ningún versículo vemos a un Jesús atacándolo por su pecado, sino lo confrontó con la “verdad”.
Entonces, ¿Cómo podemos establecer una buena comunicación con las personas?
Imaginemos, ¿Qué pasaría si Jesús estuviera hoy en la tierra y tuviera una conversación con Ricky Martín?
Estoy seguro que no lo atacaría diciéndole: “Deja de vivir la vida loca”, sino que le mostraría la verdad.
Debemos entender que lo primero que tenemos que hacer es amar a las personas, como Dios el Padre nos amó primero a nosotros a través de Jesús, y eso al final significa, que no estamos obligados necesariamente a aprobar lo que hacen.
Recordemos, la homosexualidad no es una enfermedad, sino una elección; causadas por diversos motivos y entre ellas traumas de la niñez.
La misma gracia que te salvó te transformará.
puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, quien por el gozo puesto delante de Él soportó la cruz, despreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios.
La gracia no es solo un agente de perdón es un agente de transformación
Vivimos en una cultura que te dice “sigue tus deseos obedece tu sed”
Si tienes deseos homosexuales síguelos
Si tienes deseos de estar con otra mujer que no sea tu esposa hazlo
Si quieres mirar pornografía, mira
Si quieres vivir de forma desenfrenada hazlo
Constantemente la cultura nos invita a seguir nuestros deseos, las personas dicen no hay limites, todo es permitido
Vivimos en una cultura que ha perdido los valores, pero como cristianos somos llamados a ser transformados por la gracia
No intentes cambiar por tus fuerzas, descansa en la gracia de Dios
Muchos cristianos intentan cambiar por sus fuerzas y lo único que logran es cambiar un pecado por otro.
Recuerda que la tentación es una oportunidad para victoria o derrota.
Pablo dijo:
»Con Cristo he sido crucificado, y ya no soy yo el que vive, sino que Cristo vive en mí; y la vida que ahora vivo en la carne, la vivo por la fe en el Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
Conclusión:
Recuerdas la Tercera Ley de Newton:
“a toda acción corresponde una reacción”,
Así las leyes de Dios, aunque son leyes morales de ellas aprendemos que:
“a toda desobediencia habrá consecuencias”:
Así también Sodoma y Gomorra y las ciudades circunvecinas, a semejanza de aquellos, puesto que ellas se corrompieron y siguieron carne extraña, son exhibidas como ejemplo al sufrir el castigo del fuego eterno.
Quizá hoy te encuentre luchando con un pecado de inmoralidad, quiero decirte que solo la gracia de Dios puede transformarte, rinde hoy todo tu corazón y arrepiente, Jesús quiere transformarte.
Estoy convencido precisamente de esto: que el que comenzó en ustedes la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Cristo Jesús.
Jesús dijo:
»Todo lo que el Padre me da, vendrá a Mí; y al que viene a Mí, de ningún modo lo echaré fuera.
Si el homosexual viene a mí yo no le hecho fuera.
Si el orgulloso viene a mí yo no le hecho fuera.
Si el inmoral viene a mí yo no le hecho fuera.
R.E.D.
Recuerda:
»Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a Su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en Él, no se pierda, sino que tenga vida eterna.
Recordemos que Dios nos amó primero, al permitir que su Hijo se despojara de todo y viniera a este mundo, y que a través de la cruz sufriera y diera su vida por nosotros, y así con su resurrección tuviéramos la oportunidad de demostrar ese amor, imitándolo en todo momento. Reconozcamos pues nuestro propio error y arrepintámonos.
Entiende:
»Con Cristo he sido crucificado, y ya no soy yo el que vive, sino que Cristo vive en mí; y la vida que ahora vivo en la carne, la vivo por la fe en el Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
Entendamos que después de la redención por amor, no nos llamó para levantar juicio, y tomar su lugar; debemos estar motivados a amar a aquellos que sienten atracción por personas de su mismo sexo, así como aquel que anda en pornografía, orgullo, mentira, etc.
No se trata sólo de una cuestión. Tiene que ver con personas de verdad, en la iglesia y fuera de ella.
Deja que Dios te transforme:
puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, quien por el gozo puesto delante de Él soportó la cruz, despreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios.
Debemos aprender a descansar y confiar en Jesús, dejemos que su Espiritu nos transforme en buenos imitadores de Él, reflejando en nuestros hogares, con nuestros vecinos, amigos, compañeros de trabajo, interactuando activamente con amor y verdad. Y, por último, que veamos este momento de la historia, no como un obstáculo para nuestro desarrollo o madurez espiritual, ni como un pretexto para encerrarnos en cuatro paredes huyendo ante este tema candente, no debemos tomarlo como una amenaza, sino como una oportunidad de permitir que el evangelio brille a través de nosotros.