Amistades equivocadas.
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· 13 viewsEl creyente debe ser sabio para escoger sus amistades; de lo contrario, le destruirán.
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Video: La muñeca fea.
Leer Pro 18:24 y Pro 17:17
Hay amigos que uno tiene para su propio mal, pero hay un amigo que es más fiel que un hermano.
En todo tiempo ama el amigo, Y el hermano nace para tiempo de angustia.
Una de las área de la vida cristiana en la cual debemos ser sumamente cuidadosos es en escoger nuestras amistades. De ello puede depender tu caminar con Dios. “Los amigos pueden edificarte o destruirte.”
Por lo tanto, debemos ser sabios escogiendo nuestros amigos. He visto a muchos creyentes en malos pasos debido a la influencia de amistades equivocadas.
¿Cuáles son las amistades equivocadas?
Amigos temporales.
Amigos temporales.
“En todo tiempo ama el amigo...” Pro 17:17
Es obvio que este versículo habla del verdadero amigo. Desafortunadamente, muchos de los que llamamos “amigos” solo los son durante una temporada.
Son amigos solamente cuando están solos.
Son amigos solamente cuando están solos.
Esto es muy común, en sus momentos de soledad se muestran muy amigables contigo, pero les aparecen otros amigos, se olvidan de ti.
Tú te vuelves la solución temporal a su necesidad de amistad; pero eres descartable, como un plato de cartón.
Este es un problema común entre mujeres solteras: te coquetean cuando no tienen a nadie, pero cuando aparece otro más guapo, se alejan de ti.
Son amigos pasajeros.
Son amigos pasajeros.
Todos hemos tenido “amigos pasajeros”; aquellos que viajan a tu lado en el tren de la vida, pero solamente durante una parte del trayecto; en unas cuantas estaciones se bajan del tren. Ejem: Amigos de la escuela (duran lo que dura el ciclo escolar (primaria, secundaria, universidad).
A esos nos referimos cuando decimos “yo tuve un amigo...”
Quizás el problema es que usamos muy a la ligera el término “amigo”.
Amigos interesados.
Amigos interesados.
La riqueza añade muchos amigos, Pero el pobre es separado de su amigo.
Fingen una amistad hacia ti.
Fingen una amistad hacia ti.
Su amistad es como un señuelo, atractivo para el pez, pero lleva un anzuelo escondido. Su intención es que creas que es tu amigo, pero para hacerte caer en la trampa.
Muchos han caído en ese tipo de trampa en las redes sociales. Fingen interés en ti enviándote peticiones de amistad con una foto de una mujer muy atractiva o de un hombre muy guapo (¡que normalmente no son ellos). Pregúntate, ¿por qué querrá ser tu amigo/a? ¿qué intereses tienen en común? ¿qué amigos tienen en común?
Buscan conseguir algo de ti.
Buscan conseguir algo de ti.
Muchos buscan el favor del generoso, Y todo hombre es amigo del que da.
¿Has recibido algo como esto? Hola José. Soy tu amigo Pedro. He tenido un inconveniente, me robaron mi cartera y mi celular, y estoy varado en… Yo sé que tú eres el único que me puede ayudar. ¿Podrías prestarme $200? Envíamelos por … a este lugar. Yo te los pagaré al nomás regresar a casa. Te lo voy a agradecer de corazón.
Ese es uno de los crímenes comunes de los cuales muchos incautos son víctima.
Ese tipo de “amigos interesados” dejan de serlo cuando no te logran sacar lo que quieren o cuando dejas de serles útil.
¡Ponlos a prueba! Deja de darles y observa como reaccionan.
Amigos que no edifican.
Amigos que no edifican.
¡No se dejen engañar! Bien dice el dicho, que «Las malas amistades echan a perder las buenas costumbres.»
El ratón le dijo a la muñeca fea: “tus amigos no son los del mundo porque te olvidaron en este rincón.” Una verdad que el creyente debe recordar constantemente.
Así que, nosotros los que somos fuertes, debemos sobrellevar las flaquezas de los débiles y no agradarnos a nosotros mismos. Cada uno de nosotros agrade a su prójimo en lo que es bueno para su edificación.
Un verdadero amigo es aquel que busca tu edificación, pero los “malos amigos” te inducen al mal.
“Aprende a rodearte de personas que se emocionan más que tú cuando algo bueno te sucede.” Esos son buenos amigos. El ratón continuó diciendo:
“nosotros no somos así, te quiere la escoba y el recogedor, te quiere el plumero y el sacudidor, te quieren la araña y el viejo veliz, también yo te quiero y te quiero feliz.”
Lo primero que hacen los malos amigos es alejarte de la iglesia.
Te alejan de la iglesia.
Te alejan de la iglesia.
Los primeros en inducirte al mal son aquellas “malas amistades” que no conocen a Dios y te invitan a la cerveza, a la droga, y a actividades en horas en que deberías estar adorando a Dios.
No es de extrañar que lo hagan pues, para ellos, eso es lo normal.
Aún más triste es cuando te dejas influenciar por “cristianos mundanos”.
A ellos se refiere el apóstol Pablo cuando advierte a los creyentes de Corinto, diciendo:
En mi carta les escribí que no anduvieran en compañía de personas inmorales. No me refería a la gente inmoral de este mundo, o a los codiciosos y estafadores, o a los idólatras, porque entonces tendrían ustedes que salirse del mundo. Sino que en efecto les escribí que no anduvieran en compañía de ninguno que, llamándose hermano, es una persona inmoral, o avaro, o idólatra, o difamador, o borracho, o estafador. Con esa persona, ni siquiera coman.
Si sigues juntándote con ese tipo de creyentes, tarde o temprano, terminarás haciendo lo que ellos hacen. Por eso, la advertencia es severa: “Con esa persona, ni siquiera coman.”
Si alguien trata de alejarte de tu iglesia, puedes estar seguro que no es buen amigo/a. Nomás quiere conseguir algo de ti.
Te alejan de Dios.
Te alejan de Dios.
Si esos amigos te dijeran “queremos alejarte de Dios”, probablemente no lo lograrían. Pero, detrás de ellos, hay un enemigo astuto, el león rugiente, que sabe que el primer paso es alejarte del rebaño, para devorarte con facilidad.
¿Has sabido de algún creyente que se fue al mundo, así como Demas? Sus “amigos” los alejaron de Dios.
Tú puedes hacer la diferencia.
Tú puedes hacer la diferencia.
Los verdaderos amigos son algo extremadamente valioso. Tú puedes ser ese amigo que otros necesitan, pero para ello es necesario que tomes la iniciativa.
Toma la iniciativa para hacer amistad.
Toma la iniciativa para hacer amistad.
El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigo; Y amigo hay más unido que un hermano.
¡No esperes que otros se acerquen a ti! Sé tu quien se acerque al solitario, al débil, al nuevo (trabajo, escuela, iglesia). Ofrece tu compañía, tu ayuda, y tu tiempo.
El cristiano no debe tener la actitud de “si me hablan, hablo” o “si me buscan, me encuentran”. ¿Cómo vamos a ser de influencia con esa actitud?
Sé un amigo sincero y verdadero.
Sé un amigo sincero y verdadero.
Si has saboreado al tristeza de ser defraudado por un “amigo”, sabes lo que causarás si no eres un amigo verdadero y sincero.
En el cristiano no debe existir la hipocresía ni el egoísmo. La amistad que ofrecemos debe ser sincera aunque el otro no la corresponda.
Ilust. “Yo soy su amigo”
...pero que él sea mi amigo, no lo sé. Puedo hablar solamente de mi amistad hacia él/ella.
¿Habrá un amigo perfecto?
¿Habrá un amigo perfecto?
Humanamente, ¡no! ¿Por qué? Porque todos somos pecadores. Podemos ser verdaderos amigos, pero no amigos perfectos.
Pero podemos tener un amigo perfecto: se llama “Jesús”.
»Ha venido el Hijo del Hombre, que come y bebe, y dicen: “Miren, un hombre glotón y bebedor de vino, amigo de recaudadores de impuestos y de pecadores”.
Y tenían razón: Él es un amigo de “pecadores y publicanos”; un amigo que no deja de serlo, a pesar de nuestra fallas.
Él es el amigo que siempre estará listo para ayudarnos en la necesidad, para darnos una mano cuando hemos caído, para abrazarnos cuando nos sentimos solos, para escucharnos, para llamarnos la atención cuando es necesario; un amigo cuyo único interés es nuestro bienestar.
Ese el amigo que todos necesitamos, y es Él quien nos ofrece su amistad, es Él quien buscó acercarse a nosotros. Si todavía no eres amigo de Él, puedes hacerte tu amigo hoy...