Col. Preeminencia de Cristo 2.

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Cristo es exaltado como superior a los dioses de las religiones que amenazaban la fe de los Colosenses.

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En los versos anteriores (1:3-12), el apóstol había expresado su agradecimiento a Dios por la obra que Dios había hecho entre los colosenses. Los hermanos de Colosas daban genuina evidencia de que habían conocido a Cristo: el amor amor de ellos por los creyentes era una prueba indiscutible.
1 John 3:14 NBLA
Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida porque amamos a los hermanos. El que no ama permanece en muerte.
1 John 2:10 NBLA
El que ama a su hermano, permanece en la Luz y no hay causa de tropiezo en él.
1 John 3:10 NBLA
En esto se reconocen los hijos de Dios y los hijos del diablo: todo aquel que no practica la justicia, no es de Dios; tampoco aquel que no ama a su hermano.
Pablo también había compartido su oración por los colosenses: que fueran llenos del conocimiento de la voluntad de Dios, a fin de que se comportaran dignamente, que obedecieran en todo, que su vida diera fruto para Cristo, que siguieran creciendo en conocimiento de Cristo, que fueran fortalecidos en el poder de Dios, y que vivieran una vida de agradecimiento.
Con respecto a esa vida de agradecimiento, dice en el verso 12:
“dando gracias al Padre que nos ha capacitado para compartir la herencia de los santos en luz.
Esta frase es su punto de partida para entrar al tema o propósito central de la carta: la exaltación de Cristo.

Exaltación de Cristo.

1:13-20

Él es quien libera de las tinieblas.

Colossians 1:13–14 NBLA
Porque Él nos libró del dominio de las tinieblas y nos trasladó al reino de Su Hijo amado, en quien tenemos redención: el perdón de los pecados.
El pecado sujetó al hombre bajo el dominio del principe de las tinieblas, Satanás.
Tales cadenas no podía romperlas ninguna religión, credo, rito, práctica, o filosofía. La práctica de la Ley, que era una de las amenazas a la fe de ellos, no podían romperlas; la filosofía y la mitología griega eran igualmente incapaces de romperlas, las prácticas ascéticas castigaban al cuerpo, pero no liberaban el alma.
Para eso vino Jesús a este mundo:
John 12:46 NBLA
»Yo, la Luz, he venido al mundo, para que todo el que cree en Mí no permanezca en tinieblas.
Ese Jesús, en quien los colosenses habían depositado su fe, por medio del perdón de pecados, rompe las cadenas de las tinieblas, y trae al hombre a la libertad en la luz.
Ephesians 5:6–8 NBLA
Que nadie los engañe con palabras vanas, pues por causa de estas cosas la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia. Por tanto, no sean partícipes con ellos; porque antes ustedes eran tinieblas, pero ahora son luz en el Señor; anden como hijos de luz.
1 Thessalonians 5:5 NBLA
porque todos ustedes son hijos de la luz e hijos del día. No somos de la noche ni de las tinieblas.
Solamente Cristo nos ha llamado de las tinieblas a Su luz admirable.
Con respecto a los siguientes 10 versículos, un gran número de erúditos está de acuerdo que es un himno a Cristo; un himno compuesto de dos estrofas: 15-17 y 18-20

Cristo es la imagen del Dios invisible.

1:15
Imagen (sinónimo de semejanza) implica representación y manifestación. A diferencia de los judíos, los griegos tenían un infinidad de imagenes mitológicas, cada una representando al dios de una área específica de la naturaleza: Dionisio (vino), Zeus (cielo), Poseidón (mar), Ares (guerra), Afrodita (amor, belleza, fertilidad), etc. Pero no tenían uno que fuera el dios de todo.
Cristo, por el contrario, es la “exacta representación” del Padre invisible. El Dios invisible se hizo visible en Cristo.
John 1:14 NBLA
El Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros, y vimos Su gloria, gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia y de verdad.
Cuando Jesús aseveró ser el camino, la verdad, y la vida, Felipe, quien todavía no había comprendido la deidad de Cristo, le dijo:
John 14:8–9 NBLA
«Señor, muéstranos al Padre y nos basta», le dijo* Felipe. Jesús le dijo*: «¿Tanto tiempo he estado con ustedes, y todavía no me conoces, Felipe? El que me ha visto a Mí, ha visto al Padre. ¿Cómo dices tú: “Muéstranos al Padre”?

Él es el primogénito de toda creación.

1:15b
El término “primogénito” podría causar confusión si tomamos la palabra “protótokos” como “primer nacido” porque eso haría de Cristo un ser creado. Ese sentido es usado para referirse al nacimiento de hombres y animales. El hijo o animal que nace primero es el “primo-génito”.
Pero “protótokos” significa “que existe antes de” y “que existía primero”.
Desde el punto de herencia y derecho, los judíos consideraban al “protótokos” como el que tenía el lugar especial en la familia o el que tenía la prioridad.
Por lo tanto, “el primogénito de la creación” significa que Cristo existía antes de la creación, que Él es quien tiene el lugar de privilegio, y el derecho de la herencia.
¿Y cómo no va tener esos derechos si Él el creador?

Él es el Creador y Sostenedor.

Colossians 1:16–17 NBLA
Porque en Él fueron creadas todas las cosas, tanto en los cielos como en la tierra, visibles e invisibles; ya sean tronos o dominios o poderes o autoridades; todo ha sido creado por medio de Él y para Él. Y Él es antes de todas las cosas, y en Él todas las cosas permanecen.
Estos versos enfatizan que Cristo es Señor o dueño de la creación: “En Él…por medio de Él y para Él”.
Los ángeles (seres invisibles) le deben su creación; cielos, mares, plantas (cosas visibles), animales, y hombres (seres visibles) le deben su creación.
Él es antes de todas las cosas” indica Su eternidad.
En el universo, el cósmos (orden) hay lo que llamamos leyes cósmicas, la fuerzas que mantienen el orden de los planetas, estrellas, mares, etcétera. ¿Aparecieron de casualidad? o ¿Son diseñadas y sostenidas por el Creador?
“En Él todas las cosas permanecen (lit. se conservan unidas).

Él es la cabeza de la iglesia.

Colossians 1:18 NBLA
Él es también la cabeza del cuerpo que es la iglesia. Él es el principio, el primogénito de entre los muertos, a fin de que Él tenga en todo la primacía.
Con esto está diciendo a los judíos: “no es Moisés”; y a los griegos: “no es Zeus”. El cuerpo solamente tiene una cabeza, que es la que debe dirigir a la iglesia.
Como cabeza del cuerpo, Cristo tiene la autoridad. El cuerpo obedece y actúa en base a lo que la cabeza le manda.
La primacía se refiere a estar en la primera posición, a tener el más alto rango y prominencia.

Él es quien derramó su sangre por nosotros.

Colossians 1:20 NBLA
y por medio de Él reconciliar todas las cosas consigo, habiendo hecho la paz por medio de la sangre de Su cruz, por medio de Él, repito, ya sean las que están en la tierra o las que están en los cielos.
Ninguno de los dioses de las diferentes religiones o corrientes que amenazaban la fe de los colosenses clamaba haber dado su vida por sus seguidores; una verdad que no ha cambiado ni cambiará.
Solamente Jesús murió por los pecadores. Derramando su sangre en la cruz, Él pagó el precio para satisfacer la justicia divina.
Fue a través de Su sacrificio que toda la creación (las que están en la tierra o en el cielo) fue reconciliada con Dios.
Eso implicaba o incluía la salvación de ellos.

La salvación de los Colosenses.

Colossians 1:21–23 NBLA
Y aunque ustedes antes estaban alejados y eran de ánimo hostil, ocupados en malas obras, sin embargo, ahora Dios los ha reconciliado en Cristo en Su cuerpo de carne, mediante Su muerte, a fin de presentarlos santos, sin mancha e irreprensibles delante de Él. Esto Él hará si en verdad permanecen en la fe bien cimentados y constantes, sin moverse de la esperanza del evangelio que han oído, que fue proclamado a toda la creación debajo del cielo, y del cual yo, Pablo, fui hecho ministro.
Parafraseando,
“Ustedes eran enemigos de Dios, su vida consistía de malas obras, pero Jesús obtuvo su reconciliación a un gran precio (su vida) para santificarlos y presentarlos sin pecado delante de Dios.”
Me imagino que Pablo estaba diciéndoles: no se dejen desviar, continúen en Cristo porque Él es superior a todos.
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