Es tiempo de buscar a Dios.
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El pueblo de Israel y Judá, durante el tercer y cuarto reinado, vivieron en circunstancias similares a la de nuestros días; días de intranquilidad y sin paz. Afortunadamente para ellos, llegó al trono un hombre que habría de hacer lo necesario para que cambiaran las circunstancias.
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La condición del pueblo.
La condición del pueblo.
En ese tiempo, ya Israel y Judá estaban divididos. Debido a la insensatez de Roboam, 10 tribus habían seguido a Jeroboam, y solamente Judá y Benjamín permancieron con Roboam.
Jeroboam incitó a las tribus a adorar los becerros de oro que habían adorado en Egipto. Los años pasaron, Roboam murió y fue sucedido por Abías; Abías también murio y fue sucedido por Asa.
Ahora Israel estaba sufriendo las consecuencias de haber seguido la dirección de Jeroboam en cuanto a los ídolos.
Sin paz ni tranquilidad.
Sin paz ni tranquilidad.
»En aquellos tiempos no había paz para el que salía ni para el que entraba, sino muchas tribulaciones sobre todos los habitantes de las tierras. »Y era destruida nación por nación, y ciudad por ciudad, porque Dios los afligió con toda clase de adversidades.
En los últimos 2 años, esta generación ha vivido en medio de tiempos difíciles, dificultades que nunca habían experimentado: la pandemia (4.55 millones muertos, 695,000 en USA), la sociedad estadounidense está dividida políticamente (conservadores y liberales, derechistas y socialistas), y socialmente (no hay unidad entre negros, blancos, latinos, y asiáticos).
¡El mundo no tiene paz ni tranquilidad! “No hay paz para los malvados, dice el Señor.” (Isa 48:22)
Dedicados a la idolatría.
Dedicados a la idolatría.
De cierto modo, el problema fue heredado. Comenzó desde el momento que su abuelo Roboam decidió no buscar al Señor, el pueblo se sintió libre de adorar a la criatura y no al Creador. Abías, el padre de Asa, se había apoyado en Dios y logrado vencer a Jeroboam y las 10 tribus del norte. Pero el pueblo de Asa, judíos y benjaminitas seguían adorando imagenes o “dioses” extranjeros.
El problema de esta sociedad americana es que ha hecho a un lado a Dios y se ha dedicado a adorar el dinero, la ciencia, los astros, el humanismo (incluyendo la adoración a los hijos), las estrellas de la música y del deporte.
Cuando las dificultades vienen, se preguntan ¿Y que tiene que ver Dios con todo esto? ¡Mucho! Al creyente, Dios le habla principalmente por la Palabra, pero al que no le conoce, le habla por medio de la creación.
Voz del Señor sobre las aguas. El Dios de gloria truena, El Señor está sobre las muchas aguas. La voz del Señor es poderosa, La voz del Señor es majestuosa. La voz del Señor rompe los cedros; Sí, el Señor hace pedazos los cedros del Líbano; Y como becerro hace saltar al monte Líbano; Y al monte Sirión como cría de búfalo. La voz del Señor levanta llamas de fuego. La voz del Señor hace temblar el desierto; El Señor hace temblar el desierto de Cades. La voz del Señor hace parir a las ciervas Y deja los bosques desnudos, Y en Su templo todo dice: «¡Gloria!».
“El problema no es que tiemble la tierra, que ardan los bosques, que estallen guerras, que haya pandemia, tormentas, e inundaciones. El problema es que Dios está hablando y nadie escucha.”… Slide
La razón de su angustia.
La razón de su angustia.
Por la maldad del pueblo y de sus reyes, Judá vivió muchos años de angustia e intranquilidad. Este era solamente el comienzo.
Las razones del sufrimiento y de la falta de paz no han cambiado a través de las generaciones.
En su misericordia, Dios mandó a Azarías, un profeta, para que advirtiera a Asa por medio de presentarle el ejemplo de Israel (10 tribus del norte), para que Judá aprendiera por las buenas.
Se alejaron de Dios.
Se alejaron de Dios.
“Por muchos días Israel estuvo sin el Dios verdadero...” 3a
Dios es omnipresente, Él no quita Su presencia de la faz de la tierra. Pero aunque Él estaba allí, el pueblo no le tomaba en cuenta.
Esta nación se ha alejado de Dios. Pretendiendo evitar el comparecer ante la justicia divina, han pretendido deshacerse del juez. Dios ya no tiene cabida en las escuelas, univerisades, tribunales, gobierno, y hogares.
El americano promedio, aunque dice creer en Dios, vive como que si Dios no existiera. Pero ¿Qué de ti, cristiano? ¿Le tomas en cuenta en todo lo que haces? ¿Estás esperando un momento crítico en tu vida para acordarte de Dios?
Cuando tú te alejas de un lugar, te acercas a otro. Cuando tú te alejas de Dios, te acercas al diablo.
Se alejaron de la Palabra.
Se alejaron de la Palabra.
“…y sin sacerdote que enseñara, y sin ley.” 3b
Eran como iglesia que no tiene pastor que le enseñe.
Recuerda que dejar de “oír” o de “leer” la Palabra es el primer paso a la frialdad espiritual.
¿Qué pasó con los sacerdotes? ¿Desaparecieron? ¡No! Simplemente dejaron de cumplir con su responsabilidad de estudiar y enseñar la Palabra.
Esta nación alejada de Dios necesita hombres como Esdras, el sacerdote, quien tomó su responsabilidad a pecho, y fue ha enseñar a un pueblo que había dejado de escuchar la Palabra.
“La mano bondadosa de Dios estaba sobre él...
porque Esdras había dedicado su corazón a estudiar la ley del Señor, y a practicarla, y a enseñar Sus estatutos y ordenanzas en Israel.
En ese tiempo, la gente no tenía su propia Biblia; la única manera de oír a Dios era oyendo al sacerdote. Ahora, el acceso a tener una Biblia es ilimitado: Una investigación hecha por Lifeway Research mostró los siguientes resultados:
87% de los hogares en EEUU tienen Biblia, promedio 3 por hogar. Pero, ¿Cuántos la leen? Evangélicos son 47% más propensos a leer un poquito cada día que aquellos que no son evangélicos.
Entre más asisten a la iglesia, más propensos a leer un poco cada día. 39% de los que asisten por lo menos una vez al mes leen un poco cada día; mientras que los asisten menos de una vez al mes, solamente el 13% lee un poco cada día. ¿Y te preguntas por qué este país está tan alejado de Dios?
La solución para esa condición.
La solución para esa condición.
La solución a su condición consistió en tres pasos:
Volverse al Señor.
Volverse al Señor.
»Pero en su angustia se volvieron al Señor, Dios de Israel, y lo buscaron, y Él se dejó encontrar por ellos.
Los momentos de angustia nos hacen recapacitar sobre nuestra vida. La dificultad es momento de auto-examinación. Como dicen, “en la cárcel y en el hospital, la gente se acuerda de Dios”.
Dios no se esconde del que le busca y tiene bendiciones para el que le busca:
”Porque Yo sé los planes que tengo para ustedes”, declara el Señor “planes de bienestar y no de calamidad, para darles un futuro y una esperanza. ”Ustedes me invocarán y vendrán a rogarme, y Yo los escucharé. ”Me buscarán y me encontrarán, cuando me busquen de todo corazón.
El problema no está en Dios sino en el hombre. Dios solamente responde a las acciones del hombre.
Somos nosotros los que nos alejamos de Él, y queremos que sea Él el que venga a buscarnos.
¿Quieres paz y tranquilidad? ¡Comienza volviéndote a Dios! ¡Reconoce lo lejos que estás y regresa!
Y si vas a volverte a Él, no pienses que es para seguir haciendo lo que has hecho alejado de Él. Tienes que limpiar la casa, o sea el corazón. Ese es el segundo paso.
Hacer limpieza espiritual.
Hacer limpieza espiritual.
¡El orden es importante! ¿Por qué? Porque muchos cometen el error de querer limpiarse primero y entonces venir al Señor. ¡Nunca pueden limpiarse! El “tengo que dejar esto primero” lo he escuchado tantas veces y las personas siguen en la misma condición. Primero vuélvete, y entonces haz limpieza.
Eso es lo que Asa hizo como respuesta a las palabras del profeta:
Cuando Asa oyó estas palabras y la profecía del profeta Azarías, hijo de Oded, se animó y quitó los ídolos abominables de toda la tierra de Judá y de Benjamín, y de las ciudades que había conquistado en la región montañosa de Efraín. También restauró el altar del Señor que estaba delante del pórtico del Señor.
Se deshizo de todas aquellas cosas que Dios aborrece y que los alejaban de Dios. ¿Has hecho limpieza en tu casa? ¡Haz una lista de todas aquellas cosas que te alejan de Dios y deshazte de ellas!
“Restauró el altar del Señor.” Restaurar el altar del Señor equivale a poner de nuevo a Dios en el lugar que le pertenece en tu corazón. Dios no quiere ser segundo, sino primero, rey de tu vida.
Asa hizo una limpieza total y sin favoritismos:
El rey Asa también depuso a Maaca, su madre, de ser reina madre, porque ella había hecho una horrible imagen de Asera. Asa derribó la horrible imagen, la hizo pedazos y la quemó junto al torrente Cedrón.
¡Hasta “la virgen” de su mamá se fue a la basura! Si algo es pecaminoso, aunque sea de tu abuelita, elimínala de tu casa.
Consagrarse al Señor.
Consagrarse al Señor.
Hicieron pacto para buscar al Señor, Dios de sus padres, con todo su corazón y con toda su alma; y que todo el que no buscara al Señor, Dios de Israel, moriría, ya fuera pequeño o grande, hombre o mujer.
Hicieron una promesa a Dios, a costo de lo que fuera. Fue una promesa pública: “con gran voz, gritos, trompetas, y cuernos”. Una promesa sincera de buscar a Dios de todo corazón.
Cuando tú hagas una promesa así y comiences a cumplirla, Dios se dejará encontrar y la paz y tranquilidad de Dios vendrá sobre ti.
Como tú y yo, Asa no fue perfecto, seguramente cometió errores, pero llegó al final de su vida con testimonio incomparable:
Pero los lugares altos no fueron quitados de Israel; sin embargo, el corazón de Asa fue intachable todos sus días.
¿Cómo te recordarán al final de tus días? ¿Como un cristiano mediocre y tibio? ¿Mentiroso y avaro? o ¿Un hombre intachable que buscó de todo corazón al Señor?